La violencia es el uso excesivo de la fuerza física, verbal o sicológica que se manifiesta en forma brusca e inmediata, provocando daño corporal dependiendo de la intensidad de su efecto, lo cual produce lesiones, traumatismos e inclusive la muerte de la persona agraviada. La violencia puede ser de carácter proactiva o reactiva, esta última es justificada como defensa legítima o derecho a la resistencia contra la opresión. La violencia genera irrespeto, furia incontenible e irascible actuando de esa forma para lograr sus objetivos en contra de su víctima y así producir daño sean estos físicos, psicológicos, maltrato emocional, represión política o intolerancia religiosa que se manifiesta a través de amenazas, ofensas o acciones. Este tipo de violencia es sancionada por la ley como crímenes y es penalizada de acuerdo con el grado de afectación, ya sea en forma individual o colectiva. Los tipos de violencia son: criminal, por causas sociales o económicas; política, por revolución, insurrección, terrorismo, pero también incitan las mentiras manipuladas en propagandas afectando a la audiencia, cuya frustración lo manifiestan en protestas callejeras; simbólica, como expresión verbal de impotencia a la opresión de un pueblo; económica, cuando existen amenazas para el individuo o colectividad; sociológica o patológica, ocasionada por desórdenes mentales o impulso mental que genera fuerza destructiva; natural, ocasionada por catástrofes de la naturaleza; ciberviolencia, que es difundida a través de medios de comunicación o redes sociales; de género, sea intra o extrafamiliar en contra de la mujer; cultural, que va en contra de normas éticas y morales, ya sea familiar o social; religiosa o de creencias, que pueden llevar al fanatismo con acciones terroristas y destructivas en respuestas a su obsesión e idealismo religioso; y, filogenética en forma agresiva, cuando se ataca a los animales e inclusive al ser humano como una lucha organizada, empleando herramientas mortales para así lograr sus objetivos.

Hoy en día, la violencia en el Ecuador se ha incrementado en forma alarmante, mueren a diario personas abatidas en asaltos a mano armada, secuestro, sicariato, accidentes de tránsito por parte de personas que no respetan las normas viales, abuso sexual hacia las mujeres, niños, maltrato a los ancianos, entre otros.

Ante esta actitud violenta que se presenta a diario en cualquier lugar de nuestro país, es imprescindible que el Gobierno Nacional enfoque a la violencia como un grave problema de salud pública, nuestra sociedad está afectada por las conductas agresivas y su diagnóstico es de carácter cultural, económico, sicológico y de educación social, además los medios de comunicación por vender sintonía presentan programas que inciden a la violencia y, para agravarlo, existe un sistema judicial muy cuestionado que beneficia a los ladrones, violadores y criminales, que cuando salen vuelven a delinquir. Debería el Gobierno ponerlos a trabajar mientras cumplen su condena para que tengan ingresos o estudiar algún oficio, solo así se podrán disminuir actitudes negativas que generan violencia, como el ocio y desocupación en las cárceles. “Rechacemos la violencia y egoísmo porque pueden destruir la unidad en nuestro país”. Mwai Kibaki. (O)