“Lo que natura no da, Salamanca no presta”; lo que no nace, no crece. Es un principio universal que no necesita demostración.
Invoco a nuestro Rector Universal –Dios– que introduzca en la mente de aquellos jurisconsultos, que buscan principios deducidos por el hombre que necesitan argumentos para su evidencia, dado que no existen opiniones consultivas ni principios jurídicos que estén por encima de los principios universales, que puedan ver con la mente lo que es evidente y que estas personas doctas en leyes no ven, recuerden la Biblia (la Palabra ) cuando Jesús le colocó en los párpados a un ciego un poco de lodo preparado con su saliva y el ciego vio. (Jesús utiliza tierra y lodo para hacer una obra de creación en el hombre, tal como en Génesis). Ojalá que este evento les sirva de lodo y el conocimiento que reciban sea la Palabra, y dejen de estar afectando a la comunidad con sus ideologías de género.(O)
Salvador C. Loffredo Autheman,
ingeniero civil, Guayaquil









