Triste aniversario. Ayer se cumplieron 50 años de aquel aciago 29 de mayo de 1969, cuando se produjo la brutal y criminal agresión contra la juventud estudiosa de Guayaquil por parte de huestes militares, cuyo comandante en jefe era Velasco Ibarra, con la complicidad de las autoridades universitarias de la época. En esa acción dejó la vida un grupo incierto de compañeros bachilleres. La nómina oficial hablaba de 30 muchachos, pero a nosotros no nos cuadraban los números.

Aún recuerdo con rabia y dolor aquel hecho punible, más aún nunca hubo una investigación, ni se nombró ninguna comisión tan de moda ahora. Los políticos de ese tiempo miraron hacia otro lado. Juventud actual, ¿sabes en qué consistía nuestra lucha? Anhelábamos democratizar el acceso a la educación superior. Queridos compañeros, no los hemos olvidado, viven en nuestra mente.(O)

Rodolfo Noboa Bohórquez,

ingeniero químico, Guayaquil