El cambio climático se debe a variaciones meteorológicas que tienen períodos prolongados, causados por variaciones en la radiación solar en nuestro planeta, alteraciones tectónicas, erupciones volcánicas o también por la contribución de la combustión de combustibles fósiles, que libera el gas de dióxido de carbono a la atmósfera, la emisión de cuatro gases de efecto invernadero principales: dióxido de carbono (CO2) que ha aumentado debido al uso de combustibles en el transporte, los sistemas de calefacción y aire acondicionado de edificaciones, la producción de cemento y otros bienes, y también en la deforestación. Gases como el metano (CH4) han aumentado, por las actividades humanas relacionadas con la agricultura, la distribución del gas natural y los vertederos, el óxido nitroso (N2O) con el uso de fertilizantes y la quema de combustibles fósiles y los halocarbonos, grupo de gases que contienen flúor, cloro y bromo. Las partículas de aerosoles influyen directamente en los forzamientos radiactivos a veces con efectos negativos y en la absorción de la radiación solar e infrarroja de la atmósfera.
Algunos expertos predicen que la temperatura de la Tierra subirá en los próximos cien años entre 1,8 y 4 grados, lo que tendrá efectos enormes en la biodiversidad, las lluvias, las sequías, la subida del nivel del mar o la pérdida de los hielos polares. También influirá en los recursos alimenticios y en la sanidad. El calentamiento será mayor en tierra que en el mar, la capa de nieve disminuirá y los hielos polares se encogerán, sobre todo en el Ártico, aumentará la frecuencia de las olas de calor y las precipitaciones catastróficas. Probablemente los ciclones tropicales serán más intensos, el nivel del mar subirá entre 18 y 59 centímetros, habrá fuertes vientos, lluvias torrenciales prolongadas, acompañadas de relámpagos y truenos. Este efecto climático está referido en la Biblia que dice que Dios puede también permitirle a Satanás, el dios de este mundo (2 Cor. 4: 4), tener un papel en producir calamidades en el clima.
Para muchos científicos el cambio climático es producido en forma cíclica natural, este fenómeno ha ocurrido en los últimos 10 mil años y la evidencia está bajo el mar, donde se pueden detectar las variaciones del nivel marino producidas por la fluctuación de la acción solar. Lo que sí podemos decir es que el cambio climático se debe al calentamiento global o efecto invernadero y nos está afectando actualmente con la presencia de las lluvias en todo el país, que han producido situaciones catastróficas de deslaves arrasando carreteras, puentes, viviendas en áreas vulnerables de la Costa, Sierra y Oriente ecuatoriano; además la migración de vectores está afectando en todo el país e inclusive en lugares que hoy no están expuestos. Los virus y bacterias son otro factor epidemiológico alarmante; debemos de concienciar y educar a la población para prevenir enfermedades, especialmente las respiratorias, que hoy se están presentando con mayor severidad en la población, sobre todo en niños y adultos mayores en períodos cortos de repetición. (O)