Los disparos y las explosiones no cesan desde el sábado en la Penitenciaría del Litoral por la lucha entre las bandas de Los Choneros, Lobos y Tiguerones, y pese a que más de 200 policías y 50 militares llegaron al centro carcelario, la situación parecía no estar controlada hasta el mediodía del lunes, cuando salió el carro de Medicina Legal del centro carcelario con el cuerpo de la segunda víctima mortal del fin de semana.

Se trata de Jhonny Vivero, de 29 años, quien estaba en el pabellón 9 sentenciado por robo. Él recibió varios disparos en medio del caos que este fin de semana se tomó la cárcel más poblada del país y de la que intentaron escapar 28 reos el domingo.

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Este lunes a esos privados de libertad se los llevó a la Fiscalía para la audiencia de flagrancia por el delito de evasión de la justicia, y se esperaba que en horas de la tarde sean regresados a la cárcel, de la que escaparon en medio de los disparos cuando destruyeron un muro que separa el área de hombres y la cárcel de mujeres.

Desde el sábado se ha cerrado parcialmente la circulación en la vía a Daule en varias ocasiones, pues llegan buses con equipos tácticos, ambulancias y hasta el carro de Medicina Legal. Por eso, el coronel Franklin Huerta, director de la Penitenciaría, pide a la Policía de forma permanente un equipo de respuesta que actúe oportunamente para poder evitar que se den más muertes dentro de este centro penitenciario, donde hay casi 10.000 reos.

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El primer fallecido del fin de semana fue identificado como Santos Núñez, quien estaba en el pabellón 3, y cuyo cuerpo fue retirado este lunes de la morgue.

Mientras familias acudían a la morgue, en la Fiscalía se hacía la audiencia contra los reos que fugaron y en la cárcel se trataba de controlar los pabellones tomados por las bandas. Se viralizó en redes un video supuestamente grabado dentro de la prisión.

En las imágenes se ve a un hombre vestido de naranja (uniforme de los presos) con una cuerda alrededor del cuello y un arma de fuego que lo apunta en la cabeza.

El hombre supuestamente es amenazado de muerte. Esto para evitar que los líderes de la banda Nueva Generación sean trasladados a otras prisiones, pues intentan acaparar el control de la Penitenciaría del Litoral.

Alrededor del mediodía de este lunes, el coronel Huerta señaló que hasta esa hora los disturbios dejaron dos personas muertas y once heridos, que fueron llevados a varios hospitales del Ministerio de Salud.

Dos guías penitenciarios salieron con el listado de las víctimas por los enfrentamientos entre bandas. Un joven de unos 25 años pidió que le confirmaran que su hermano había sido asesinado antes de tomar su moto e irse a la morgue. Otras familias se enteraban de que sus allegados estaban en alguna casa de salud y rápidamente se trasladaban para allá, aliviados de que estén con vida.

Carlos León, coordinador de seguridad penitenciaria, dijo que ni la noche del domingo ni la madrugada de este lunes se han dado nuevos disturbios; sin embargo, quienes viven frente a la prisión aseguraron haber escuchado disparos y detonaciones a las 22:00 del domingo y a las 02:00 del lunes. Esto, según León, podrían ser explosiones controladas realizadas por personal del Grupo de Intervención y Rescate (GIR).

El general Fausto Buenaño Castillo, comandante de la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón), explicó el domingo que al llegar con el equipo policial se percataron de que las PPL de los pabellones 3, 4, 5, 6 y 7 se habían salido de ellos y protagonizaron una balacera, pero se los logró poner en orden, quedó todo en calma y el personal de la Policía se retiró del lugar.

Sin embargo, luego de la tarde del domingo se reactivó el desorden en ese mismo centro penitenciario: las PPL de los pabellones 8 y 9 salieron por las terrazas y dispararon en contra de las PPL de los pabellones 3, 6 y 9.

Acotó que en este enfrentamiento están involucrados integrantes de bandas: Choneros-Águilas vs. Tiguerones y Lobos.

Agregó que se hicieron requisas minuciosas, pero no se encontraron las armas de fuego. Se decomisaron celulares, sustancias ilícitas, entre otras evidencias. (I)