El fuerte olor de putrefacción llamó la atención de los vecinos del sector Vida Nueva 2000, en el cantón Durán. En el interior de una vivienda se encontró, este sábado 12, el cuerpo colgado de una mujer de 36 años.
Personal de unidades especiales de Policía, como Criminalística y Judicial, llegó al sitio para realizar las respectivas diligencias. Allí, constataron la presencia del cuerpo, que estaba suspendido del cuello con una soga.
Familiares de la fallecida acudieron a la escena y reconocieron el cadáver, que se encontraba en avanzado estado de descomposición.
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Una hija de la occisa pidió que se sigan las indagaciones para determinar si se trata de un suicidio o muerte provocada. Pese a ello, uniformados adelantaron que el caso tendría relación con la primera hipótesis.
“Que no se quede así; que haya justicia. Si es alguien que la ha matado, que se dé con la persona”, dijo la hija.
La fallecida, identificada como Jéssica Arias Macías, se dedicaba al comercio de artículos de manera ambulante en calles de Durán.
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La familiar de la ahora occisa indicó que la última vez que la vio fue el domingo anterior, durante una comida. Ella aseguró que no se notaba a la mujer con problemas emocionales.
Sin embargo, la propia hija indicó que años atrás ella perdió a dos hijos en un incendio y tenía problemas de consumo de droga.
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Cerca de las 13:00, el cuerpo fue retirado en un vehículo de Medicina Legal, de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE). Los uniformados estiman que la mujer llevaba unos tres días de fallecida. (I)
