La Policía tiene bajo custodia a Jorgi P. S., alias 4K, operador clave de la banda Los Choneros, tras un enfrentamiento armado en el cantón Jaramijó, provincia de Manabí.
Este presunto delincuente resultó herido en un cruce de balas con miembros de una banda contraria y ahora recibe atención médica en un centro de salud de la provincia bajo estricta vigilancia policial.
Giovanny Naranjo, comandante de la Policía en Manabí, dijo que el pasado 25 de septiembre ocurrió una balacera en la avenida Alajuela, donde grupos de delincuencia organizada se enfrentaron violentamente. Una persona murió en el sitio y 4K escapó con heridas graves.
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Inmediatamente, unidades de inteligencia de la Policía de Manta rastrearon su paradero. Tras una inspección técnica, verificaron que se trataba del sospechoso vinculado a ataques sangrientos en el país.
Naranjo dijo que 4K conecta directamente con dos masacres que conmocionaron a Ecuador: el 19 de julio, un tiroteo en un billar en Villamil Playas, Guayas, que dejó once muertos; solo ocho días después, el 27 de julio, escapó momentos antes de otro ataque en el bar La Clínica, parroquia Las Guayas, El Empalme, en el que hubo diecisiete fallecidos y tres heridos.
Por otro lado, el historial criminal de 4K incluye una condena en 2017. En noviembre de 2016, lo detuvieron junto con dieciséis personas por delincuencia organizada en Posorja, cerca de Playas.
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La Fiscalía lo identificó en una red de tráfico de drogas, y un juez lo sentenció a 20 meses de prisión. Ahora, médicos lo operaron el 29 de septiembre y reportan su condición estable.
Sin embargo, la Policía prioriza la seguridad en el hospital. Coordinaron medidas para proteger al personal y pacientes del riesgo que representa 4K. Lo mantienen en calidad de aprehendido, pendiente de formalización de cargos. (I)
