José M., un ciudadano de la tercera edad, acudió a la Fiscalía de Flagrancia del Cuartel Modelo, situada en la avenida de las Américas, en el norte de Guayaquil.
El ciudadano presentó una denuncia por una presunta suplantación de identidad que habría derivado en un proceso de coactiva con una empresa eléctrica.
El hombre relató que el pasado 14 de octubre, alrededor de las 10:30, se encontraba en un centro comercial del sur, dentro de las instalaciones de una agencia bancaria, cuando al intentar cancelar sus tarjetas de crédito fue informado por una de las trabajadoras del banco de que tenía una retención judicial activa.
Publicidad
El personal del banco le comentó que existía una medida por un juicio de coactiva en una entidad de servicio eléctrico de Durán. “Algo que me sorprendió completamente, porque jamás he adquirido un medidor ni he firmado contrato alguno con esa institución”, explicó el hombre.
El afectado aseguró que al acudir a las oficinas de la entidad eléctrica para solicitar información únicamente le facilitaron un número telefónico del abogado a cargo del proceso, pero no le entregaron detalles sobre el supuesto contrato.
“Me dijeron que existía un contrato y que se habían realizado citaciones en mi domicilio... Nunca recibí ninguna notificación ni he firmado documento alguno”, manifestó López, visiblemente preocupado mientras estaba acompañado de su hija.
Publicidad
Con el fin de corroborar la supuesta deuda, el ciudadano indicó que se acercó a tres agencias de la entidad eléctrica, ubicadas en la Garzota, Portete y Durán, donde tampoco obtuvo respuestas claras sobre el origen de la obligación.
“Solo me dijeron que el proceso estaba en curso, pero nadie me mostró pruebas del contrato. Por eso temo que alguien esté utilizando mis datos personales”, añadió.
Publicidad
El denunciante señaló además que desde finales de septiembre no ha podido recibir transferencias bancarias, presuntamente debido a la medida judicial impuesta por esta deuda que desconoce.
López presentó formalmente su denuncia ante la Fiscalía para que se realicen las investigaciones pertinentes y se determine si existe o no una suplantación de identidad.
Según relató, una abogada con la que mantiene contacto le advirtió que el hecho podría corresponder a una suplantación de identidad y que casos similares se han vuelto cada vez más frecuentes en los últimos meses. (I)



















