La bancada del movimiento Pachakutik, este 25 de agosto, presentó a la Asamblea Nacional un proyecto de reformas a la Ley de Comunicación que, según la legisladora Dina Farinango, “entierra aquel libertinaje que un proyecto simple se entregó por parte del Gobierno nacional”.

La propuesta contiene 28 artículos, 6 disposiciones transitorias y 1 disposición final, y según Farinango es bastante completa y que en su elaboración participaron pueblos y nacionalidades, representantes de universidades y medios comunitarios.

Que es un proyecto que fortalece la libertad de expresión dejando atrás aquellas persecuciones que se ejercían mediante ley, además, afirmó que la propuesta de Pachakutik entierra la propuesta del Ejecutivo que establece un libertinaje.

Con su propuesta, dijo se reitera el compromiso de una adjudicación justa para los medios comunitarios, porque creen que es importante garantizar que el 44 % del espectro debe pertenecer a los pueblos y nacionalidades.

El proyecto pasará a conocimiento del Consejo de Administración Legislativa (CAL) para su calificación y luego será remitido a la Comisión de Relaciones Internacionales, que analiza el proyecto de Ley de Libertad de Expresión y Comunicación presentado por el presidente de la República, Guillermo Lasso, así como otras propuestas de sectores sociales y políticos.

Plantean que la Ley de Libertad de Expresión y Comunicación sea tramitada en bloques distintos

Según la proponente de Pachakutik, el proyecto plantea una representación real de la ciudadanía en el Consejo de Regulación. Establece, además, una diferenciación entre los medios públicos gubernamentales y medios públicos en general.

En la presentación del proyecto también participó el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, Leonidas Iza, y comentó que la propuesta se relaciona con múltiples objetivos del desarrollo sostenible declarado en las Naciones Unidas, en particular al que se refiere a la educación de calidad, puesto que los medios de comunicación deben ser un canal para la circulación de información de carácter educativo y cultural, y además con igualdad de género.

El proyecto de reformas, añadió Iza, defiende los derechos de la comunicación y fortalece la libertad de expresión, y promueve la democratización de los espacios para los medios comunitarios públicos y privados.

Insistió en que la propuesta de Pachakutik no solo defiende los derechos de la información y comunicación, la libertad de expresión, de opinión y de prensa, sino que se somete a los estándares internacionales en la materia y combina la autorregulación de los medios con medidas de regulación.

Resaltó que la propuesta no es punitiva ni abre la posibilidad de sanciones administrativas, por lo tanto, prohíbe toda forma de censura previa o limitación a la libertad de expresión; pero mantiene la responsabilidad ulterior por las expresiones que se emitan, sin penalizarla.

También propone acciones afirmativas concretas para democratizar a los medios de comunicación de los grupos más vulnerables.

Autorregulación no es suficiente

Cristina Benavides, directora de la carrera de Comunicación de la Universidad Central del Ecuador, explicó que en las reformas se plantea la defensa de la comunicación como un sector estratégico, que se defiende a la comunicación como un derecho humano y social que debe estar garantizado en las leyes del país.

Que el proyecto intenta salvaguardar a los medios de posibles injerencias e intereses externos, pues plantea que los medios de comunicación social no podrán pertenecer en todo o en parte de forma directa o indirecta a organizaciones, compañías o empresas extranjeras.

Igualmente, el proyecto establece el derecho de todas las personas a expresarse libremente de cualquier forma y por cualquier medio manteniendo siempre la responsabilidad por sus expresiones y que al mismo tiempo esté anclado a una lógica normativa institucional.

Para la representante de la academia, la autorregulación no es suficiente, sino que necesita un marco normativo que permita defender la libertad de expresión en todas sus formas.

También se introduce en las reformas la obligación de que los medios públicos y privados y comunitarios deben expedir códigos deontológicos orientados a mejorar sus prácticas de gestión interna y su trabajo comunicacional.

Se prohíbe la censura previa, la protección del periodista y la aplicación de la responsabilidad ulterior; eso significa que exista la responsabilidad de la ciudadanía, pero también de los medios de comunicación en el ejercicio permanente de su labor.

Indicó que no quieren que haya comunicadores precarizados. Le decimos al Gobierno, añadió Benavides, no queremos que la comunicación se precarice, estamos por defender el trabajo de los comunicadores.

En la normativa que se plantea a través del bloque Pachakutik se incluye también la existencia del Consejo de Comunicación, con una conformación menos oficialista y más ciudadana, afirmó Benavides.

La comunicación pública no tiene que ser del gobierno de turno, sino que la comunicación pública les pertenece a los ciudadanos, y por tanto, esa es la comunicación que se defiende.

Que para un correcto equilibrio de fuerzas, los medios comunitarios deben tener una fuerte presencia en la distribución de frecuencias, que aspiran a que se cumpla la franja del 44 %. (I)