El trámite del proyecto de ley urgente sobre el combate a las economías criminales, que envió el presidente Daniel Noboa a la Asamblea Nacional, será una suerte de prueba para determinar si los legisladores están a la “altura de la historia” para hacer las reformas constitucionales por esa vía y no en una asamblea constituyente.

Es lo que planteó el ministro de Gobierno, José de la Gasca, en una entrevista con radio Centro, la mañana de este 19 de mayo del 2025, al hablar sobre la agenda de trabajo del presidente Daniel Noboa para su nuevo mandato y de la mayoría legislativa oficialista.

De la Gasca explicó que el proyecto de ley “tiende a pulverizar a las economías criminales, a neutralizar a los combatientes, pretende resolver el conflicto armado interno y lo que este promueve de una manera eficaz y eficiente”.

Publicidad

Para ello se propone reconocer la figura del conflicto armado interno, dándole reglas específicas. Pues “no podemos vivir en un estado de excepción permanentemente”, dice, como lo ha advertido la Corte Constitucional (CC). “Tenemos que naturalizar dentro del ordenamiento jurídico las reglas con las cuales podamos enfrentar esta amenaza. Veamos si la Constitución y la clase política están al tono”.

En ese sentido, hizo un llamado a todas las fuerzas políticas, entre ellas la Revolución Ciudadana (RC), para que legislen en favor del pueblo.

Sobre las críticas que ha recibido el proyecto respecto de que algunos temas son inconstitucionales, como los allanamientos sin órdenes judiciales, audiencias únicas, confiscación de bienes, señaló que la ley es perfectible. “Para eso están los debates en las comisiones legislativas”.

Publicidad

De la Gasca opinó que el ordenamiento constitucional y jurídico no están preparados para enfrentar la problemática del crimen organizado, y por ello es que desde el Gobierno se ha hablado además de hacer reformas constitucionales profundas.

La decisión del Gobierno es “empezar por estos proyectos de leyes y así es como se irán construyendo estas figuras de los cambios constitucionales (...). Sé que me van a decir que el tema de la Constitución es de arriba hacia abajo, pero vamos a ir empujando esta necesidad de abajo hacia arriba con los proyectos de ley. A ver, que me digan que eso va a resultar inconstitucional por tal o cual cosa, no, señores, esto no puede ser una camisa de fuerza para que no podamos luchar contra el narcoterrorismo”.

Publicidad

El funcionario comentó que la propuesta de asamblea constituyente que hizo Noboa en campaña está en compás de espera, pero no se ha descartado.

“Tengo corazón constituyente, pero cabeza política”, admitió. Y reconoció que las reformas constitucionales requieren una mayoría calificada de 101 votos que, por ahora, no hay en la Asamblea.

Indicó que, además, tienen que respetarse las reglas previstas en la Constitución, y que la Corte Constitucional ha marcado la ruta para hacer cambios.

“Tenemos que ver cómo este tipo de proyectos nos muestran si la realidad constitucional nos va a servir para luchar contra el flagelo. Es imperativo que esta Asamblea demuestre que está a altura de este desafío”, dijo.

Publicidad

Sobre la integración de la nueva Asamblea, el ministro aclaró que las negociaciones políticas que se dieron para armar las mayorías fueron transparentes, en lugares públicos, sin componendas, y añadió que se seguirán sumando más apoyos.

“Mayoría es mayoría, a mí no me gusta hablar de mayorías frágiles, las autoridades del Poder Legislativo se han configurado con ella, las comisiones también. Hemos consolidado un liderazgo en la Asamblea que es el resultado del voto popular...”, comentó.

Admitió que en política no existe nada “escrito en piedra”, sí existen los diálogos para armar una agenda legislativa de largo aliento. (I)