La misión del Ejército ecuatoriano “será neutralizar y eliminar las amenazas” que se presenten durante los operativos de seguridad que ejecuta el Gobierno nacional en contra de la delincuencia. Esa fue la consigna con la que asumió oficialmente la Comandancia del Ejército el general de brigada Henry Delgado Salvador.
Casi dos meses después de haber sido ascendido a comandante del Ejército, Henry Delgado se posesionó en la función en una ceremonia militar que se realizó en la Escuela Militar Eloy Alfaro, en el noroccidente de Quito, este 11 de junio de 2025.
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Al acto asistió la vicepresidenta de la República, María José Pinto, además de otras autoridades.
Fue a través del Decreto Ejecutivo 615, del 24 de abril pasado, que el presidente de la República, Daniel Noboa Azín, ascendió a Henry Delgado como comandante de la Fuerza Terrestre y cesó en sus funciones a Edwin Adatty Albuja, quien se encontraba en ese cargo desde noviembre de 2023.
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El discurso del comandante estuvo marcado por un pedido a los representantes de las funciones del Estado de apoyar la labor de las Fuerzas Armadas y también hizo un llamado para que se asignen “nuevas capacidades” para combatir las amenazas.
“Vivimos escenarios complicados”, dijo Delgado, quien ofreció liderar un proceso de recuperación de la seguridad con un pie de fuerza que está “listo para defender la patria”.
“Nuestra lealtad es inquebrantable. Tenemos claro que nuestra misión actual es neutralizar e inclusive eliminar, por efectos de las operaciones, a aquellas amenazas”, zanjó el oficial a la tropa.
En medio de estos escenarios críticos en los que vive el país, de continuos estados de excepción y la declaratoria de un conflicto armado interno por el incremento de la criminalidad, hay un “mejoramiento” de la institucionalidad con la aprobación de nuevas leyes, como la de Solidaridad Nacional y de Inteligencia, exaltó.
Por su parte, la segunda mandataria dirigió unas palabras de respaldo a la institución militar en esta tarea. (I)
