Una nueva sentencia, un reciente traslado carcelario y un hábeas corpus negado marcaron el 2025 para Jorge Glas, pero su situación judicial sigue abierta y con penas pendientes de cumplimiento dentro del sistema judicial ecuatoriano.
El pasado 28 de diciembre, el juez Jean Valverde negó el habeas corpus presentado a favor de Glas y descartó su traslado a un hospital. La decisión se tomó tras audiencias realizadas el 26 y 27 de diciembre, en las que el magistrado concluyó que no existió vulneración de derechos y que el exvicepresidente recibe atención médica dentro del centro penitenciario. La defensa anunció que apelará el fallo.
¿Cuanto le falta a Glas por cumplir de su condena?
El exvicepresidente cumple actualmente una pena unificada de ocho años de prisión, derivada de dos condenas ejecutoriadas: seis años por asociación ilícita en el caso Odebrecht Ecuador y ocho años por cohecho pasivo agravado en el caso Sobornos 2012-2016. De acuerdo con el último cómputo de pena realizado en mayo de 2023, a Glas le resta un poco más de un año por cumplir de esta condena.
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Dentro de este cálculo no se incluyó el año de presentaciones periódicas que cumplió desde noviembre de 2022, cuando se le concedió una libertad provisional, ni el tiempo —menor a cuatro meses— en el que permaneció como asilado del Gobierno mexicano entre diciembre de 2023 y abril de 2024, cuando fue retirado por el Gobierno de Daniel Noboa a través de una incursión militar a la sede diplomática.
Aunque sus abogados han dicho que él ya cumplió el total de la pena unficada en octubre del 2025, pero esto no ha sido declarado formalmente por ninguna judicatura.
A esta pena se suma una sentencia de primera instancia de 13 años de prisión por el delito de peculado dentro del caso Reconstrucción de Manabí, dictada por la Corte Nacional de Justicia en junio de 2025. Este fallo aún no está en firme, pues la defensa de Glas ha anunciado que presentará un recurso de apelación.
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Además, el exsegundo mandatario continúa como investigado en el proceso por el asesinato del excandidato presidencial Fernando Villavicencio. Aunque no figura entre las personas formalmente procesadas, su nombre ha sido mencionado en testimonios y versiones dentro de la causa, por lo que la Fiscalía mantiene abiertas las indagaciones.
En este escensario, más allá del cambio de centro carcelario, Glas enfrenta todavía tiempo de prisión por cumplir, una condena adicional pendiente de resolución y procesos judiciales que mantienen en suspenso su futuro legal.
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(I)
