Ángel Rojas, trabajador de una funeraria en Estados Unidos, falleció a los 24 años de edad tras un accidente donde fue aplastado por una de las bóvedas del lugar. Antes de fallecer, envío un mensaje de voz para su esposa en señal de despedida.
Rojas se encontraba realizando sus actividades en la Funeraria, Cementerio y Crematorio Restland de Dallas cuando una de las bóvedas de hormigón, que debía trasladar a lugares de entierro, cayó sobre el, aplastándolo de cintura para abajo.
Tras el accidente, el trabajador usó su teléfono para solicitar ayuda y enviar el mensaje a su cónyuge. “Me dijo que me amaba y que quería irse a casa” mencionó Natalie Rojas, su esposa, en una entrevista para el portal de noticias WLTB 3.
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Las autoridades requirieron más de 45 minutos para liberar el cuerpo de Ángel Rojas, que falleció en un hospital posteriormente. Para su rescate se utilizaron separadores hidráulicos y bolsas de aire según reportes de New York Post.
La familia del fallecido denuncia negligencia de la funeraria y analiza la posibilidad de presentar una demanda. “No debería haber estado trabajando solo. No debería haber estado moviendo cosas de ese peso él solo.” declaró Matthew Graham, abogado de la familia.
Ángel Rojas aceptó el trabajo para mantener a su familia, deja en la orfandad a un menor que esta próximo a cumplir 4 años de edad. (I)
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