Cuando las dietas extremas se convierten en una aobsesión pueden ser las cusantes de consecuencias irreversibles en las personas con antecedentes de enfermedades crónicas. Tal fue el caso de Shane Warne, la leyenda del criket australiano, quien murió mientras realizaba una “dieta líquida” de 14 días continuos para bajar de peso.

Aunque las autoridades no han confirmado que esa alimentación haya sido la causa de su fallecimiento, el reconocido deportista padecía de problemas cardíacos que pudieron complicar su situación al sostener una alimentación extrema por más de una semana.

El Daily Mail informó que la estrella del criket murió a los 52 años, tras sufrir de un infarto mientras disfrutaba de unas vacaciones en Tailandia, cuando fue hallado muerto en su habitación del hotel donde se hospedaba.

Publicidad

A decir del profesor Garry Jennings, asesor médico de la Heart Foundation en el caso de Warner pudo ocurrir una descompensación, partiendo del mal manejo que se dio en el organismo con el manejo de los líquidos, sal y los electrolitos, dando lugar a un ataque al corazón.

Pero una dieta líquida basada en agua, té, café, jugos de frutas, gelatinas y caldos pudo ser la condición que llevara a Shane Warne al colapso, teniendo en cuenta de que el corazón suele trabajar forzado bajo este régimen alimenticio, el cual no era primera vez que lo hacía y al contrario, solía practicarlo en su afán de combatir el sobrepeso. (I)