Pablo Laurta, acusado de doble feminicidio, asesinato y secuestro de un menor, volvió a hablar ante los medios de comunicación durante su traslado a la Jefatura Policial de la ciudad de Córdoba desde Gualeguaychú en un operativo reforzado conjunto de las fuerzas de seguridad.

El acusado insistió en que las dos mujeres tenían una "denuncia por explotación infantil" en referencia a Luna Giardina, su expareja, y Mariel Zamudio, su exsuegra. Sobre el asesinato de Martín Sebastián Palacio, remisero que fue desmembrado, no emitió comentarios.

“Hice lo necesario para rescatar a mi hijo” mencionó en su llegada a la jefatura "Estoy en paz porque mi hijo está seguro ahora” en relación a su denuncia contra sus víctimas y enfatizó en que va a “ayudar todo lo que pueda” en el caso.

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Tras la audiencia, fue trasladado al Complejo Carcelario N° 2 de Cruz del Eje, a 148KM de la capital cordobesa. También enfrenta cargos en Entre Ríos por el asesinato del remisero que contrató para su traslado de Concordia a Santa Fe.

Varias declaraciones y futuro judicial

Laurta se negó a declarar ante la fiscal en Entre Ríos sobre el asesinato de Palacio, pero habló ante los medios durante sus traslados. El acusado mencionó “Yo fui a rescatar a mi hijo” durante su salida de los Tribunales de Concordia.

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“Todo fue por justicia” complementó ante las preguntas de los periodistas y lanzó “Hay que venerarlo, es un mártir” en una frase que generó confusión y debate en medio de sospechas de querer hacerse pasar por inimputable.

La fiscal Daniela Montagnie, que imputó a Laurta por el asesinato de Martín Sebastián Palacio, declaró que el acusado “está lúcido y consciente de sus actos” lo que confirmaría su imputabilidad en los casos que enfrenta.

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Fuentes de La Nación explicaron el futuro judicial del acusado: “En Córdoba, Laurta será juzgado por el doble homicidio; una vez terminado ese proceso, en Entre Ríos afrontará otro por el crimen del chofer de la aplicación que lo traía a esta ciudad y al que asesinó”.

El hijo de Laurta y su víctima se encuentra bajo los cuidados de un matrimonio cercano. Ellos, junto a una maestra del jardín de infantes, se presentaron ante el SENAF (Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia) con la intención de contribuir en cuidados y contención para el menor hasta definir su custodia definitiva. (I)

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