No habrá clases presenciales en los establecimientos escolares de Esmeraldas, Atacames y Rioverde, por escasez del servicio de agua potable debido al desfase de un transformador en la planta de tratamiento de la Epmapse en San Mateo.
La disposición fue emitida por el Ministerio de Educación, Deporte y Cultura y entrará en vigencia desde este lunes, 15 de septiembre.
Las clases se desarrollarán bajo la modalidad no presencial a partir de esta fecha y hasta nuevo aviso. Esta medida se toma como precaución ante el daño del transformador que suministra a la planta de tratamiento de agua, lo que afecta el servicio en la zona, agrega el comunicado de esta institución.
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Este domingo 14 arribó el transformador de 10 MVA para reemplazar el que se dañó por una falla eléctrica en la planta de agua potable.
El equipo, que es prestado por Emapag e Interagua de Guayaquil, fue trasladado en un camión cama baja tipo tráiler.
Técnicos de CNEL-EP y Epmapse, con una grúa de EP Petroecuador, realizan el montaje y acoplamiento del equipo prestado.
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El alcalde Vícko Villacís espera que no se presente otro desperfecto o una iguana, lo que habría ocasionado una sobrecarga eléctrica.
La población esmeraldeña recibe el líquido vital mediante distribución de tanqueros y por tuberías de manera controlada desde los siete tanques reservorios.
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Amira Gómez, del barrio Los Girasoles, sur de la urbe, logró llenar algunos recipientes desde su conexión domiciliaria.
“A los vecinos recurrimos para que nos regalen un balde de agua para el aseo personal o preparar los alimentos”, comentó. Dijo que desde el viernes anterior se quedó sin agua porque no tiene tanque elevado o aljibe para almacenamiento.
En otros barrios, la entrega se hace mediante tanqueros con resguardo militar para evitar aglomeraciones o retención de los vehículos, como ha ocurrido en otras emergencias por falta de agua potable en la capital esmeraldeña. (I)