Para muchos quiteños y visitantes, la época de Navidad es propicia para caminar por el centro histórico con el objetivo de realizar turismo comercial y adquirir diversos artículos para sus seres queridos.

Ante ello, varias ferias navideñas se han implementado en calles como la García Moreno, la Chile o el sector de La Marín, donde emprendedores ofertan todo tipo de artículos, como camisetas, busos, zapatos y calentadores, principalmente del área textil.

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Pero también están quienes expenden detalles artesanales, como billeteras y monederos de cuero, peluches tejidos, cremas y jabones para el uso diario. Asimismo, se ha instalado una feria gastronómica en la calle Chile, con el objetivo de generar mayores ingresos a través de la gastronomía quiteña, basada en la venta de pristiños, buñuelos, espumilla y empanadas, característicos de estas fechas.

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Alta afluencia, pero ventas bajas

Sin embargo, y pese a la gran afluencia de personas que han copado la plaza Grande, la plaza de San Francisco o las zonas aledañas a los centros comerciales Tejar, Merced y Unión y Progreso, el nivel de ventas se mantiene por debajo de lo regular, en comparación con el 2024, según los propios comerciantes.

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“Poco a poco se está comenzando a mover. Son cosas pequeñas, porque las grandes no se venden. No sé, la gente creo que no tiene el dinero suficiente y no compra mucho. Esperemos que el último fin de semana que queda se pueda vender más”, sostuvo Laura Griselda, propietaria de Creaciones Melendrez.

Su propietaria dijo que las ventas no han estado como lo esperaban Foto: Alejandro Ortiz

El viernes 19, ella permanecía sentada a un costado de su estand, donde se exhibían varios artículos elaborados en cuero: billeteras, monederos, carteras y otros productos que las manos de Laura confeccionan para comercializar en la zona.

El mismo criterio compartió Verónica Toaza, presidenta de la organización Manuela Sáenz, quien resaltó la valentía de cada emprendedor al levantarse muy temprano para salir a vender productos que elaboran con notable esfuerzo.

La presidenta de la organización Manuela Sáenz comparó al 2024 con este año y ha visto un descenso en ventas extravagante Foto: Alejandro Ortiz

“Es una fecha en la que vienen muchos compatriotas y se llevan un recuerdo. Se ha vendido más bajo de lo regular, pero algo ha goteado como para salvar el día. En el 2024 hubo más ventas, más comercio; en cambio, este año ha decaído totalmente”, apuntó la emprendedora.

Toaza añadió que los extranjeros y migrantes ecuatorianos son quienes más adquieren detalles pequeños, mientras que los residentes en el país observan, preguntan precios y continúan su camino, como en un día normal.

La esperanza puesta en el último fin de semana

Por su parte, Vicente Robles, comerciante de la calle García Moreno, se mostró más optimista y aseguró que la jornada laboral impide que las personas se acerquen masivamente, por lo que planea llegar muy temprano durante este último fin de semana para duplicar sus ventas.

“Yo diría que regular. En el 2024, a estas alturas, ya teníamos prácticamente la mitad de los productos agotados; pero con la bendición de Dios sabemos que, hasta fin de mes, podremos llegar a nuestras expectativas”, añadió.

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El mismo panorama se vive entre los emprendedores de la calle Chile, quienes cambiaron el giro de su negocio y ofertan un amplio menú de comida quiteña.

“En el día no vendemos mucho; a veces nos quedamos con sobrantes y nos toca botar porque se dañan. Queremos que este último fin de semana la gente venga al centro”, manifestó Pedro Constanza, vendedor de pristiños y buñuelos de dulce.

Él se mostró positivo y espera que la gente llegue en gran número este fin de semana Foto: Alejandro Ortiz

Más abajo, en los grandes locales de La Marín, las encargadas permanecían en las puertas esperando clientes, mientras gritaban: “¿Qué busca? ¡Pase, aquí tenemos zapatos de buena marca!”.

Era una forma de enganchar al transeúnte, que solo pensaba en llegar rápidamente a tomar el bus debido a la inseguridad que representa esta zona del centro histórico de la capital.

“La verdad ha estado flojo. Quizá el pasado fin de semana se vendieron $ 20 de lo que sacamos todos los días, pero se siente que estas navidades todo el mundo está golpeado. Solo nos queda esperar que el último fin de semana haya un incentivo grande para poder llevar la cena a nuestras familias”, concluyó Sandra Guachi, encargada de un local de ropa.

Este fin de semana, centros comerciales, ferias de emprendimientos y locales abren muy temprano en el norte, centro y sur de Quito para recibir a la ciudadanía.

Las autoridades municipales recomendaron no movilizarse en vehículo particular y hacer uso del transporte público para evitar colapsos en la movilidad. (I)