Una jueza de Garantías Penales dictó prisión preventiva contra policías en servicio activo de Pedro Carbo.

Los agentes son procesados por el delito de concusión debido a que aparentemente pidieron $ 1.000 a la dueña de un motel a cambio de no aprehender a su administrador.

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Kevin Steeven R. Z., Steven Andrés P. Ch. y William Roberto I. I. son los tres agentes que están siendo procesados.

Este caso se comenzó con base en el artículo 281, inciso primero, del Código Orgánico Integral Penal (COIP), que sanciona el delito de concusión con pena privativa de libertad de tres a cinco años.

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Durante la audiencia de flagrancia y formulación de cargos, desarrollada en la Unidad Judicial Multicompetente de este cantón, el fiscal del caso presentó los elementos de convicción que harían presumir la participación de los ahora procesados en el hecho investigado.

Como parte de los indicios, la Fiscalía presentó informes investigativos y partes de aprehensión, así como la evidencia recabada en el operativo de captura: dinero en efectivo y un arma de fuego, ingresados en cadena de custodia, además de videos en los que habría quedado registrado el hecho.

Esta investigación se inició tras la denuncia de la propietaria de un motel de Pedro Carbo. Según el testimonio, tres agentes de la Policía Judicial ingresaron al establecimiento alegando que ejecutaban un allanamiento y afirmando que habían encontrado un arma de fuego.

Los sospechosos habrían señalado al administrador del local como la persona en posesión del arma, por lo que este se comunicó con la propietaria, quien envió a un allegado para mediar en la situación, según datos de la Fiscalía.

El proceso indica que los policías presuntamente exigieron 1.000 dólares para no proceder con la aprehensión del administrador. Ante la negativa y la oferta de solo 600 dólares, los procesados amenazaron con que, de no pagar, Fiscalía clausuraría el establecimiento. Esta interacción fue grabada por las cámaras de seguridad del motel.

Tras la denuncia de la dueña del hotel, la Fiscalía ejecutó un operativo en flagrancia y logró la aprehensión a los uniformados en las instalaciones de la Policía Judicial.

La Fiscalía halló en poder de los involucrados dinero en efectivo, un arma de fuego (presuntamente hallada en el motel), armas de dotación, indumentaria policial y varios teléfonos celulares, entre otras evidencias. (I)