Ibarra

Los propietarios y administradores de los más de 60 hoteles categorizados como turísticos en Ibarra están preocupados por los estragos de la crisis energética. Los cortes de luz bajaron la ocupación en un 60 % y los costos de operación subieron, ya que tuvieron que adquirir plantas y generadores.

Publicidad

El último fin de semana, pese a que en Ecuador y Colombia se registraron feriados paralelos e Ibarra cerró las fiestas de fundación con una agenda de conciertos con artistas internacionales, la presencia de visitantes no fue la esperada.

No se cumplió con la expectativa de los operadores turísticos locales.

Publicidad

Hubo presencia de viajeros de Pichincha y Colombia, pero fue la misma que en otros años, coincidieron los hoteleros y dueños de negocios de diversión nocturna. El incumplimiento en los horarios establecidos para los cortes de luz los tiene molestos, pues eso afectó la planificación que tenían.

Ibarra cierra sus fiestas con tres grandes conciertos internacionales en este feriado

Luis Carlos Ruiz, propietario del hotel Royal Ruiz, sostuvo que el problema energético tiene “ahorcado” al sector, ya que la gente no quiere hacer turismo por ahora y los clientes frecuentes que había entre lunes y viernes (ejecutivos y agentes de ventas) ahora no se quedan y prefieren regresar el mismo día.

Los dueños de discotecas, restaurantes, bares, entre otros, aseguraron que sus actividades se redujeron en un 90 % debido a la mala percepción de seguridad que hay en la ciudad y la falta de iluminación nocturna.

“Un hotel por lo general opera económicamente con una ocupación de más del 35 % y no con un 25 % como sucede actualmente. Esta situación está siendo analizada por los hoteleros locales, quienes no descartan liquidar a empleados o incluso a cerrar”, comentó Ruiz.

Danilo Sánchez, presidente de la recientemente creada Cámara de Turismo de Ibarra, concuerda en que sin luz la gente deja de desplazarse desde otras ciudades y refirió que los giros de negocios de diversión nocturna están entre los más golpeados y estarían a punto de hacer una pausa en sus actividades.

De $ 13 a $ 20 suben los focos recargables en Ibarra en medio de los apagones

Restaurantes, asaderos de pollo, bares y afines no son ajenos al problema.

Cristóbal Salas mencionó que la cadena de frío al paralizarse afecta seriamente a los alimentos. Agregó que, pese a contar con un generador, ahora es necesario adquirir reguladores para enfrentar los cortes o la reanudación abrupta del servicio de energía.

En todos estos negocios la queja recurrente es el incumplimiento en los horarios de suspensiones y los daños que estarían sufriendo los equipos y electrodomésticos que utilizan.

Danilo Sánchez exhortó a que los actores del sector turístico se unan para enfrentar la emergencia. Esta semana se reunirá la Cámara de Turismo de Ibarra para elaborar un pronunciamiento que será entregado al Gobierno.

La creación de una línea de crédito para la adquisición de generadores y plantas eléctricas propuesta por el Gobierno genera más dudas que certezas, especialmente porque estos tipos de productos de la banca estatal no son ágiles.

El tren vuelve a rodar en Imbabura y se espera cubrir un segundo tramo próximamente

Recuerdan que la línea de créditos productivos dirigidos al sector turístico no resultó efectiva, ya que debieron de efectuar innumerables trámites por más de dos meses en BanEcuador y al final no accedieron a los referidos empréstitos.

El sector sugiere que estos programas (créditos para generadores) deben ser ágiles, directos, sin tanta tramitología y rápidos. Y añadió que el Gobierno debería buscar a los proveedores de generadores y plantas eléctricas para volver menos complicada esta línea de crédito, como sucedió con las cocinas de inducción en el tiempo del expresidente Rafael Correa.

Un generador estaría costando entre $ 6.000 y $ 25.000, la instalación y los materiales valdrían unos $ 1.500 más, señaló Luis Carlos Ruiz, mientras que una planta está entre unos $ 500 y $ 800, más instalaciones que podrían servir para residenciales u hoteles pequeños.

Una de las mayores preocupaciones entre los hoteleros de Ibarra es que, si los apagones se extienden, el mejor nicho de visitas del año, que comienza el 15 de diciembre y concluye el 6 de enero con la masiva llegada de turistas colombianos en vacaciones, se vería afectado, ya que estos podrían optar por no venir al país. (I)