Esmeraldas
Una llamada de auxilio del barrio Divino Niño, sector Nuevo Quinindé (centro de la provincia de Esmeraldas), movilizó a dos servidores policiales en un patrullero de esta institución, la noche del jueves 28.
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La emergencia fue reportada a través del ECU911 a las 19:00, confirmó el Comando Subzona 8 de Esmeraldas, y no a las 21:00, como se reportó en redes sociales.
El vehículo policial era conducido por el cabo segundo Enrique Tupiza Lamingo, quien al ingresar con su compañero al Divino Niño fueron atacados por sujetos armados a bordo de una motocicleta. Ellos asestaron disparos contra el patrullero, detalló la institución policial.
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No se detalló la emergencia de auxilio que recibieron los servidores policiales baleados; únicamente se dijo que el barrio Divino Niño es considerado zona insegura, donde las calles son de tierra y en su mayoría presentan baches.
El uniformado fue baleado por el costado izquierdo del patrullero, donde falleció sentado dentro del vehículo. Los proyectiles impactaron a la altura de la cabeza, según indicios preliminares.
El otro servidor policial resultó ileso y fue llevado a una casa de salud de Quinindé y su cuadro clínico era estable hasta la noche de ayer, según datos de la misma Policía.
Enrique Tupiza era oriundo de Calderón, Quito, y prestaba sus servicios en el Distrito de la Policía de Quinindé. El cadáver fue trasladado por Medicina Legal al centro forense de Esmeraldas.
Hasta la mañana de este viernes 29 no se informó de los resultados del operativo policial para ubicar a los responsables de este hecho violento.
Este es el segundo asesinato de policías en servicio activo en el cantón Quinindé, considerado el tercero con muertes violentas de la provincia de Esmeraldas.
El 31 de agosto del 2022 falleció baleado el subteniente Jorge Bermeo Gudiño y herido otro policía, mientras cumplía con otros uniformados un procedimiento policial dentro de un centro de diversión nocturna de la ciudad de Quinindé.
Dos sospechosos de participar en el ataque que cobró la vida del policía en Quinindé murieron en el hospital y centro de aseguramiento transitorio, luego que fueron aprehendidos.
Otro servidor policial asesinado fue Leuder Cangá Perlaza, de 23 años, la madrugada del martes 28 de noviembre, mientras cumplía funciones de seguridad en los exteriores de la vivienda de la prefecta de Esmeraldas, Roberta Zambrano, ubicada en el recinto Las Piedras, a unos 10 kilómetros de la capital de la provincia.
Era el conductor del patrullero policial que se encontraba parqueado en los exteriores de la residencia de la autoridad provincial.
El alcalde de Quinindé, Ronal Moreno, y habitantes de Puerto Quito (noroccidente de Pichincha) solicitan la aplicación del Plan Fénix para neutralizar delitos en estas dos jurisdicciones. (I)