La tarde de este miércoles, 4 de mayo, fue clausurado un hostal clandestino, en los exteriores de la terminal terrestre, ubicado en el sur de Tulcán.

Allí se encontraban hospedados 20 migrantes de nacionalidad venezolana, en condiciones inhumanas.

Alexis Enríquez, intendente de Policía de Carchi, explicó que estas personas estaban hacinadas en espacios insalubres, por lo que fueron evacuadas y puestas a órdenes de Migración para que se investigue este presunto caso de tráfico de migrantes.

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En hotel de Tulcán se hospedaban más de 45 extranjeros que intentaban viajar a Estados Unidos

Policías y militares llegaron hasta este lugar con el objeto de retirar a los extranjeros de esa edificación y esclarecer este hecho.

Según Fernando Trujillo, jefe del Distrito de Policía Tulcán, se trataría de una nueva forma de movilizar personas al margen de la ley, ya que cuando fueron sacados de ese sitio, entre sus pertenencias tenían cocinetas y colchones. Los administradores de esta vivienda (hostal) son de nacionalidad colombiana y venezolana.

Existe la presunción de que el inmueble era alquilado para albergar a los extranjeros que pretendían ingresar al interior del país cautivados por los salarios en dólares y hacia otras naciones como Perú, Chile, Brasil, donde viven sus familiares, sin los documentos correspondientes.

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Los supuestos viajeros preparaban sus alimentos en las habitaciones, mientras esperaban que la organización que lideraba este aparente negocio los movilice hacia ciudades ecuatorianas o al sur del continente.

Testigos alertaron a las autoridades sobre estos hechos irregulares que ahora son investigados. El hostal no contaba con los permisos de operación para su funcionamiento.

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Además trascendió que alojaba a personas por horas con piezas totalmente antihigiénicas, como indicó Diana Pozo, gobernadora de Carchi, quien lideró esta operación.

No descartan los entes de control que desde ese lugar se planificaban situaciones anormales que sobresaltan a esta zona, considerada la más peligrosa de la capital carchense.

Durante la acción combinada con militares y policías resultaron además clausurados un hotel y dos restaurantes que ofertaban sus servicios con áreas insalubres, frente a este centro de movilidad.

El tráfico o trata de migrantes es uno de los delitos recurrentes en la frontera norte. Meses atrás ciudadanos de nacionalidad asiática, africana, hindú, haitiana, eran alojados irregularmente en hoteles de Tulcán, mismos que recorrían las calles de esta urbe en grupos, portando billetes de $100 y hablando en su idioma, ya que desconocían el español.

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Arribaban hasta esta parte de la frontera ecuatoriana - colombiana con el apoyo de los denominados “coyoteros”, que los trasladaban luego hacia Ipiales, frente a Tulcán, donde iniciaban un periplo peligroso para hacer realidad el denominado sueño americano, utilizando la ruta del Tapón del Darién, zona selvícola en Panamá que forma la frontera entre Colombia y ese país.

La Corte Suprema de Estados Unidos tras autorizar a la administración del presidente Donald Trump deportar migrantes bajo la Ley de Enemigos Extranjeros del siglo XVIII, redujo la presencia de extranjeros que pretendían viajar a ese país utilizando esta ruta. (I)