Las industrias del país ya realizan un catastro de cuáles empresas están en capacidad de autogenerar energía y ahorrar potencia, a fin de que luego de un análisis de factibilidad y disponibilidad en conjunto, puedan proponer la cantidad de megavatios (MW) que podrían aportar para superar la crisis energética. Así lo anunció la presidenta de la Federación de Industrias del Ecuador, María Paz Jervis, a través de sus redes sociales.

Esto, dentro del proceso que anunció la semana pasada el presidente de la República, Guillermo Lasso, al indicar que se buscará que empresarios de Guayaquil y Quito vendan energía al Estado por 100 MW al menos.

Jervis había explicado que el 28 de octubre, como Federación de Industrias, asistieron a reuniones en Quito y en Guayaquil que el presidente Lasso convocó para tratar este tema.

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Además el sector industrial había hecho dos propuestas: que el Gobierno permita a las empresas comprar diésel eléctrico para la generación en sus plantas. Además, pedía permitir la baja de potencia para ciertas industrias a las que, por su naturaleza, les resulta imposible parar.

La posibilidad de que las industrias entreguen energía es una de las medidas que ha previsto el Gobierno para combatir apagones, que se retomaron este lunes 6 de noviembre, luego del feriado de Difuntos e independencia de Cuenca, en el que no hubo cortes de luz.

Este lunes 6, los cortes de luz de al menos 2 horas diarias se produjeron a nivel nacional, mientras este mismo día los niveles de generación de electricidad en tiempo real a través de hidroeléctricas en el país bajó al 62 %, lo que significa que la producción de energía térmica está en 38 %. El nivel normal de generación hidroeléctrica, cuando no existe estiaje es del 90 %, frente a un 10 % de térmica. El sábado 4 de noviembre también hubo una baja importante de generación hidroeléctrica, pues se llegó al 60 % y 40 % de térmica.

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¿Cuáles son las empresas que estarían en posibilidad de entregar la energía?

Fernando Salinas, experto en temas energéticos, explicó que las empresas que podrían entrar en este proceso son industrias productivas, por ejemplo de alimentos, cementeras, mineras, etc. Estas empresas generalmente tienen grupos de electrógenos que funcionan con diésel y generan energía. Los grupos generadores son de emergencia, pues estas grandes empresas necesitan tener confiabilidad en su proceso productivo. La idea es que esos grupos de emergencia se pongan a disposición de las empresas en todo momento, para que estas y no demanden energía del sistema nacional. Así se reduciría 100 MW, explica.

Para Salines, esto puede ser una solución parcial, pero antes se deben establecer ciertas condiciones, pues por generar a través de sus propios recursos, les significa a las empresas un costo operativo adicional. Así, las empresas deben comprar más combustible para generar energía. En este sentido lo que debe definirse es en qué términos se haría la compra de la energía o si habría un diésel subsidiado.

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De acuerdo con Salinas, el tema también pasa por saber si el parque térmico de emergencia de las empresas está totalmente a punto. En este sentido, el catastro dirá qué potencia está disponible ya o cuánto puede irse aportando a futuro. Un ejemplo de que este sistema podría funcionar es lo que está pasando al momento con la empresa minera canadiense Lundin Gold (Fruta del Norte), que está produciendo con su propia energía y de esta manera está evitando que haya cortes en Loja, Zamora Chinchipe y Morona Santiago.

Sobre el tema, Lundin Gold informó que frente a la situación actual del sector eléctrico ecuatoriano, la empresa ha informado a la Empresa Eléctrica Regional del Sur S.A. (EERSSA) que está operando con varios generadores que abastecen hasta 7000kW (7MW) internamente lo que alivia al Sistema Nacional Interconectado. “A través de esta iniciativa, la compañía suma esfuerzos al Gobierno Nacional y a la Empresa Eléctrica Regional del Sur S.A. (EERSSA) en beneficio de la población”.