La situación de inseguridad y la salida de las Fuerzas Armadas a las calles después del Decreto 111 del presidente Daniel Noboa, firmado el 9 de enero pasado, que reconoce la existencia de un conflicto interno armado y dispone a los uniformados ejecutar operaciones militares para neutralizar a los grupos delictivos, generaron el apoyo de la empresa privada, que además se está organizando para ayudar durante los patrullajes con la entrega de comida y otros víveres.