La provincia de Pichincha está formada por ocho cantones, y uno de ellos es Mejía que en los últimos día ha aumentado los casos de COVID-19. En la actualidad existen 378 contagios, y por tal motivo las autoridades municipales han solicitado al COE Nacional el regresar para este lunes 20 de julio al semáforo rojo.

De sus 378 casos confirmados, en junio tuvo 129 (34,13 % de su total cantonal); en julio lleva 22 con corte al 9 de julio por fecha de inicio de síntomas. En mayo tuvo 148 casos, en abril, 59; y en marzo, 20. Entre el 1 de junio y 9 de julio (39 días) ha acumulado 151 casos, lo que representa en promedio casi cuatro contagiados más por día.

El alcalde de Mejía, Roberto Hidalgo Pinto, manifiesta que es lamentable regresar al semáforo rojo, esto se debe a que la mayoría de los cantones que rodean al Distrito Metropolitano de Quito no poseen una buena estructura de sistemas de salud y de hospitalización, es decir, "poseemos hospitales básicos que solo están en la capacidad de estabilizar a los enfermos contagiados de COVID-19".

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Hidalgo menciona que si los enfermos se agravan tienen que ir a buscar camas UCI a Quito, en el hospital Enrique Garcés, en donde ellos están asignados, y en este momento en dicho hospital no existe camas UCI, y esto ha llevado al fallecimiento de muchos ciudadanos del cantón.

Además, el alcalde se refirió a la indisciplina que existe por parte de un sector de los habitantes de dicho cantón, porque la gente sale a jugar voleibol, fútbol, y además, salen a libar en la vía pública, y esto ha generado el contagio del coronavirus.

Por otro lado, junto con los concejales del cantón solicitaron en junio al COE Nacional, la ampliación del toque de queda e imponer la ley seca, pero dicha solicitud no fue aceptada, y en este segundo pedido aumentaron dos horas más en el toque de queda.

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El alcalde dice que el regreso al semáforo rojo no cambia mucho con respecto al amarillo, porque recordemos que los colores de los semáforos han sido modificados, y por esta razón, no se regresa a un aislamiento total.

Espera que este regreso al semáforo rojo ayude a poder controlar a los ciudadanos en el territorio. Además, "seguiremos en campaña de bioseguridad, como es: el lado de las manos, el uso de la mascarilla y el distanciamiento social".

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En cuanto a los controles, el alcalde manifestó que en todo el territorio cantonal existirán más controles por parte del personal militar y policial. (I)