La Guía de Mamíferos del Parque Nacional Sangay tiene como objetivo principal mostrar de forma simple y muy visual a las especies de este tipo de animales que habitan en el área protegida que está ubicada entre Cañar, Chimborazo, Tungurahua y Morona Santiago.

En el documento, que se puede descargar gratuitamente, está el registro fotográfico de 96 de 176 mamíferos que habitan en los ecosistemas del Sangay que van desde tierras subtropicales hasta el páramo.

Las imágenes fueron recopiladas a través de diez años de investigación. En este tiempo se han realizado 17 expediciones, que comenzaron en diciembre de 2010, y visitado 12 localidades del área protegida.

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Jorge Brito, biólogo investigador del Instituto Nacional de Biodiversidad (Inabio) y quien participó del proyecto, afirma que han tratado de incursionar en el ‘corazón’ del Sangay para documentar la fauna del área protegida.

La raposa chica rojiza habita en el Sangay. Foto: Cortesía Jorge Brito.

La mayoría de fotos de la guía fueron tomadas por los especialistas directamente, aunque también se usaron cámaras trampa. En el documento gráfico, además, aparecen las tres especies nuevas de mamíferos registradas en este parque nacional: el ratón marsupial de Sangay, la rata trepadora de Albuja y el ratón andino de Salazar. También hay imágenes de animales peculiares como pacaríes, osos hormigueros gigantes, pumas, osos andinos, ciervos enanos, murciélagos, entre otros.

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“Para el proyecto colocamos trampas cámara, pero por lo remoto de los sitios en Sangay se dificultaba regresar por las cámaras, entonces, en la guía hay muy pocas fotos capturadas con esta técnica, no pasan de siete. El resto de imágenes son fotos tomadas por nosotros”, revela Brito.

El experto eligió Sangay como centro de su estudio debido a que creció en las cercanías y vio el potencial que existe en esta zona. Afirma que aunque Sangay fue declarado Patrimonio Natural de la Humanidad en 1983 no había generado interés en la comunidad científica. Una de las razones sería el difícil acceso al parque.

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Aunque reconoce que estas condiciones de aislamiento han protegido a Sangay. Además, resalta la labor de los guardaparques de la zona. Sin embargo, indica Brito, hay áreas cercanas a centros poblados que están experimentando presión por la caza, agricultura, ganadería, tala y actividades extractivas ilegales. Todo esto afecta a las especies de mamíferos del lugar.

En las partes de los páramos pasta ganado comunitario. “Claro no es de culpar a las comunidades, ya que cuando los límites del parque fueron creados originalmente lo hicieron desde mapas trazados en escritorios y cuando constataron en territorio se dieron cuenta que varias comunidades se quedaron dentro de los límites y hasta ahora están allí como en Sucúa y Méndez”, señala el experto.

Un puerco espín fue captado en el Parque Nacional Sangay. Foto: Cortesía Jorge Brito.

Solucionar este tipo de problemas es complejo ya que la reubicación no sería una opción. Los guardaparques del Sangay han hecho campañas de educación ambiental con estas poblaciones para que usen lo necesario, no talen más bosque y tecnifiquen los cultivos. “Esto ha ayudado y la tala de bosque ya no hay. Solo hay pasto, pero ¿hasta qué punto esto puede aguantar si la población seguirá creciendo?, algún rato necesitarán más territorio”, reflexiona Brito.

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El experto seguirá investigando sobre la fauna del lugar. Detalla que está trabajando para publicar dos nuevas especies de mamíferos en los próximos meses.

Denuncian despidos de funcionarios

La Asociación de Guardaparques del Ecuador (AGE) mostró su descontento, a través de un comunicado, y rechazó el despido de al menos 600 funcionarios, entre técnicos y especialistas del Sistema de Áreas Protegidas. El cese de funciones habría sido comunicado mediante un correo electrónico enviado por el Ministerio del Ambiente y Agua (MAAE) el viernes 19 de junio.

La “pérdida de vigencia del nombramiento provisional” sería la causa de las desvinculaciones. La AGE compartió en redes sociales el supuesto memorando, en el que se lee que se habría declarado desierto un concurso de méritos y oposición y que el MAAE no realizó una nueva convocatoria, por lo que los nombramientos actuales perdieron vigencia.

La etiqueta #SinGuardaparquesNoHayConservación se usó para dar a conocer el hecho. El MAAE afirmó que no serían guardabosques los funcionarios desvinculados. Señaló que las notificaciones fueron enviadas a personas con nombramientos provisionales y que obedecen a temas administrativos inherentes al proceso de fusión entre el MAAE y la Secretaría Nacional de Agua. (I)