Científicos ucranianos observaron atónitos el pasado lunes que la nieve alrededor de su base de investigación Vernadsky en la Antártida estaba roja. El lugar parecía que había sido escogido por un grupo de animales para librar una sanguinaria batalla, pero no fue así. El tinte rojo en la nieve es causado por las algas microscópicas Chlamydomonas nivalis.