“En ningún escenario, el Gobierno Nacional ha considerado el adelanto de elecciones”, aclaró el secretario de Comunicación de la Presidencia, Gabriel Arroba, ayer, luego de un evento del Ministerio de Educación al que también asistió el presidente Lenín Moreno.

La aclaración de Arroba se suma a declaraciones realizadas en ese sentido por el ministro del Ambiente, Raúl Ledesma. Aunque el funcionario luego dijo que las hizo en referencia a los intereses electorales de ciertos grupos políticos.

La ministra de Gobierno, María Paula Romo, también descartó por completo esta posibilidad ayer. “No es algo que estemos analizando de ninguna manera en este momento”, señaló en el canal público.

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Aunque la posibilidad de adelantar las elecciones, conocida como “muerte cruzada” consta en la Constitución, Romo y Ledesma agregaron que, ante el archivo del proyecto de ley de crecimiento económico, por parte de la Asamblea, el Gobierno lo que hará es, por la vía democrática, enviar otro proyecto de ley urgente.

La “muerte cruzada” es una figura incluida en la Constitución del 2008.

El adelanto de elecciones es consecuencia de la disolución de la Asamblea por parte del presidente de la República, en sus tres primeros años de mandato y se puede decidir por dos causas: cuando el Legislativo se arroga funciones o cuando de forma reiterada e injustificada obstruye la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo. (I)