Mientras en la Asamblea Nacional varios legisladores, incluso  del bloque de Gobierno, propusieron dividir la Ley de Crecimiento Económico y tratar los temas económicos urgentes (tributarios) y dejar de lado los no urgentes (monetarios), analistas advierten los riesgos de que el país entre en un abismo fiscal si no se actúa.

Hernán Pérez Loose afirma que “lo correcto sería que la Asamblea elabore, prepare responsablemente un proyecto alternativo”. Cree que sería grave no hacer nada o “rechazar el proyecto y devolvérselo al Ejecutivo y que el país entre en un abismo fiscal terrible”. 

El analista Walter Spurrier considera que si no se aprueba la ley, vendrá un “ajuste económico por las malas, porque en la economía no habría dinero... vendría una contracción, traería un efecto positivo como la reducción de costos internos, pero sería socialmente muy duro. Si esa situación no se soluciona, los propios agentes económicos van a comenzar  a pedir al  Gobierno que solucione esa falta de liquidez, eso significaría toma de medidas, los resultados serían que a la postre se va a caer la dolarización”.      

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León Roldós sugiere como una vía reelaborar el proyecto del Ejecutivo en la Asamblea, pero “lo importante es que los sectores políticos y el Gobierno estén en ánimo de llegar a una conciliación”. En el Legislativo, ayer a las 13:32 se clausuró el primer debate de la ley. 

Walter Spurrier: La Asamblea debe recoger dos o tres aspectos tributarios

¿Qué debería hacer la Asamblea con el proyecto?

Deberían recogerse los dos o tres asuntos tributarios más razonables, rechazar los otros y con eso pare de contar; pero a su vez, en compromiso con los asambleístas y las autoridades financieras, ver cómo va ir el veto parcial del presidente, para que sea aceptable para la Asamblea y pueda votarse de inmediato y entre en vigencia.

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¿Cuáles serían?

Hay una propuesta de reducir las recaudaciones y darle un tratamiento preferencial de impuestos a las cervezas artesanales, si de pronto le diera el mismo tratamiento a todas las cervezas. Según el cálculo que se hizo ante la Asamblea eso generará $40 millones... quien bebe cerveza artesanal es el consumidor que le gusta probar algo distinto, compra artesanal o importada, pero no necesita que se le venda más barata, pienso que eso se podría mantener.  Se  podrían mantener también los impuestos a la telefonía celular, no va a afectar a todos de manera importante, pero generaría una buena cantidad de ingresos. Dejaría esos dos y alguno más a sabiendas que va a haber un veto parcial.

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¿Qué sucedería si no se aprueba la ley?

Estamos esperando que el 15 de diciembre haya un desembolso del Fondo Monetario, porque el del 15 de septiembre está atrasado, son $500 millones, sin eso no sé cómo se va a pagar los sueldos a la administración pública. 

¿Y los efectos en la economía del país?

Vendrá el ajuste económico por las malas, porque en la economía no habría dinero... vendría una contracción, traería un efecto positivo como la reducción de costos internos, pero sería socialmente muy duro. Si esa situación no se soluciona los propios agentes económicos van a comenzar  a pedir al  Gobierno que solucione esa falta de liquidez, eso significaría toma de medidas, los resultados serían que a la postre se va a caer la dolarización.        

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¿El alza de combustibles todavía es opción?

Para simplificar: (aumentar) tres puntos del IVA daban $1400 millones, el alza de los combustibles, como estuvo propuesta por el Gobierno, daba $1400 millones al año; si no van ninguna de las dos cosas entonces se está haciendo algo intermedio, se está haciendo una propuesta de reforma tributaria que generaría  $700 millones, vendría a través de un alza de los combustibles que daría  $700 millones y eso se daría por la gasolina extra y no del diésel. Si pasa la reforma tributaria y sube la gasolina ahí están los $1400 millones y estamos encuadrados.  

León Roldós: Hay que simplificar y bajar el popurrí de microtributos

La discusión sobre el texto de ley del Ejecutivo apenas empieza, pero desde ya hay objeciones en la Asamblea por la creación o alza de impuestos. ¿Cómo advierte el trámite legislativo?

Hasta el 17 de noviembre debe haber una decisión. Hay tres posibilidades: un voto afirmativo del texto enviado por el presidente, un voto afirmativo de negativa a ese texto y una reelaboración del texto enviado por el Ejecutivo. 

¿De dónde surge esa tercera vía?

La tercera vía es reelaborar, la Comisión debe trabajar eso. 

¿Es decir, la propuesta debe surgir desde la Comisión de Régimen Económico?

Sí. Lo importante es que los sectores políticos y el Gobierno estén en ánimo de llegar a una conciliación; si no, el proyecto del Ejecutivo entrará “de pleno derecho”. Es un paquetazo, lo fueron armando como una colcha de bregué que tiene de todo: 404 artículos, 22 leyes reformadas. 

¿Por qué es un paquetazo?

Porque le han metido de todo. Había posiblemente un texto preparado de antes, quizás con polillas. Pero no puede ser que así se abuse de la urgencia y necesidad de una ley económica.

¿Urgencia en atención a los pedidos del FMI?

No, nada de eso lo ha revisado el FMI. Esto es un popurrí de tributos, algunos procedentes, otros no, como el del impuesto a los empresarios con ingresos de un millón de dólares para arriba. Al presidente nadie le contó que ese impuesto se recaudará en el 2021, o sea, lo va a recaudar su sucesor.

¿Qué debe plantear el texto reelaborado?

Debe simplificar el proyecto. Por ejemplo, bajar todo este popurrí de microimpuestos a 8 o 10 (impuestos); trabajar en los temas de ordenamiento presupuestario y del gasto público. Luego, la ley aprobada va al presidente para que la vete o sancione; entonces allí tiene para trabajarse el veto con el presidente.

Este escenario se daría si la relación entre el Ejecutivo y Legislativo fuese óptima.

Así debería ser. Yo quiero invocar a los líderes de las fuerzas políticas a que tengan claro que si dejan pasar la ley por el silencio de la Asamblea saldrá un monstruito, un paquetazo Frankenstein que traerá problemas para el país.

¿Y habrá los votos para el texto reelaborado?

Insisto: depende de las fuerzas políticas y del Gobierno. Yo creo que si hay un macroacuerdo sí habrá los 70 votos. Ese macroacuerdo tiene dos actores: CREO y Gobierno. Lo ideal sería que eso más el PSC, más los votos del pepiteo, acuerden un texto alternativo. 

Hernán Pérez: Hay que elaborar un texto alternativo a pesar del tiempo

El 17 de noviembre vence el plazo para que se apruebe o no en segundo debate el proyecto de Ley de Crecimiento Económico en la Asamblea Nacional. Luego, correrán 30 días para que el Ejecutivo lo vete o no. ¿Alcanzan los tiempos para cerrar el año con el nuevo proyecto de ley?

Tal como están las cosas, lo más probable es que sí haya tiempo, porque inclusive cuando pasen los 30 días, imaginémonos que la Asamblea produce un proyecto alternativo, el (Ejecutivo) tiene 30 días para vetarlo, y si no lo veta en 30 días entra ya el proyecto definitivamente, estamos hablando mediados de diciembre, todavía nos queda un poco de tiempo. 

Usted menciona un texto alternativo, ¿cree importante que se trabaje en ello a menos de dos meses de culminar el año? 

Lo correcto sería que la Asamblea elabore, prepare responsablemente un proyecto alternativo, que a pesar de la brevedad del tiempo sí es posible, lo que no creo es que no se haga nada, en una especie de lavarse las manos; y la otra e igualmente de grave  es simplemente rechazar el proyecto y devolvérselo al Ejecutivo y que el país entre en un abismo fiscal terrible. 

¿En qué debería centrarse ese texto alternativo?

Yo creo que el proyecto debe centrarse en asuntos tributarios y es lo que más urge a la caja fiscal y son la mayoría de tributos que entran en vigencia el 1 de enero del próximo año. Sí hay una urgencia en ese sentido.

¿Presidente y Asamblea deberían dialogar?

Es un deber de la Asamblea presentar un proyecto alternativo y luego negociar con el presidente si él va a ejercer su derecho al veto, negociar los términos, llegar a un acuerdo político, es decir, hasta qué punto la Asamblea cede en las legítimas aspiraciones que tiene el Ejecutivo, en qué puntos no va a ceder, presentar una alternativa y otros temas dejar para más adelante.

¿Qué asuntos? 

En materia de asuntos que pueden esperar, no obstante que son necesarios para el país, es el fortalecimiento de la autonomía del Banco Central, ahí hay una serie de reformas importantes, que afianzan esa autonomía, que a pesar de no estar reconocida constitucionalmente, nada impide que esa autonomía sea sostenida y legislada, pero que podría esperar a diciembre o enero. Lo que no puede esperar son una serie de ajustes tributarios. (I)