El pasado miércoles 12 de junio se publicó en el Registro Oficial N° 507 el Reglamento del Código Orgánico del Ambiente (CODA). Dicha normativa, en su artículo 188, prohíbe la importación de fauna silvestre marina, marina costera y acuática, nativa y exótica.

Con esto se cerraría la posibilidad de que en Ecuador se instalen delfinarios con fines de entretenimiento, espectáculos o parques acuáticos temáticos, en los cuales se mantenga en cautiverio estas especies. El Movimiento Animalista Nacional (MAN) calificó como una "victoria" la publicación del reglamento. 

"Reiteramos nuestro respaldo a proyectos serios, apegados a la norma jurídica y al bienestar animal, como los acuarios que trabajan en la rehabilitación de estas y otras especies, con fines de conservación y científicos. Vivan los delfines libres en Ecuador", indicó MAN a través de un comunicado. 

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¡VICTORIA ANIMALISTA! Con la publicación del reglamento al CODA en el Registro Oficial, Ecuador prohíbe la importación de mamíferos marinos. Ecuador cierra la puerta a delfinarios y parques acuáticos con fines de entretenimiento. ❤️---------- #DeWaterlandANeverland pic.twitter.com/yxYkux3U7T

Dirigentes de esta agrupación solicitaron la semana pasada al ministro del Ambiente, Marcelo Mata, que agilice los procedimientos para que el reglamento esté vigente. 

Incluso la agrupación ambientalista Pacífico Libre anunció, a través de redes sociales, una marcha que debía realizarse ayer en Salinas, Santa Elena, para exigir que se ratifique la negación de los permisos a la empresa internacional Waterland para la construcción de un delfinario en dicha localidad. Sin embargo, la protesta fue cancelada a raíz de la expedición del Registro Oficial. 

Los que sí realizaron un plantón en Salinas fueron unas veinte personas que con carteles y consignas se mostraron a favor de la construcción del delfinario. Aseguraron que la empresa generará plazas de trabajo e incentivará el turismo durante todo el año en el balneario. 

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"Waterland se está yendo del país. Le pedimos al ministro que nos ayude. Somos 120 personas que tendremos trabajo directo en el acuario fuera del trabajo indirecto", dijo Maritza Egreth una de las manifestantes.

En cambio, Danilo del Valle, otro de los manifestantes, dijo que se está frenando la inversión extranjera en el país: "En muchos países del mundo hay este tipo de atractivos. Nosotros solo tenemos turistas cuando son feriados y fines de semana. ¿El resto del año de qué vivimos? No es la forma de tratar a la inversión extranjera", aseguró. 

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Rechazaron los cuestionamientos ambientales que se han realizado contra el acuario. "Los delfines que vendrán nacen en cautiverio. No son del país, vendrán en un avión fletado. Los ambientalistas que critican viven en Quito, no saben la realidad de aquí (Salinas)", dijo Egreth.

Sin embargo, Cristina Alarcón, vocera de MAN, afirma que no se oponen a la inversión extranjera siempre que "estas actividades no atenten contra el bienestar animal".

Indica que su organización apoya proyectos como el que se lleva en Puerto López, Manabí, con el avistamiento de ballenas, donde "se respeta a los animales en su hábitat y se los puede ver libres sin atentar contra su comportamiento natural. Nosotros buscamos una convivencia armónica del humano con las otras especies con las que compartimos el Planeta".

Alarcón también asegura que el Ministerio del Ambiente negó los permisos porque el proyecto "no cumple con lo estipulado por la ley ecuatoriana". (I)

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