La contaminación de las fuentes hídricas es una realidad mundial que exige respuestas inmediatas, pero para hallar esas respuestas es necesario que cada persona tome conciencia sobre cómo aportar en el cuidado del agua, desde utilizar productos para la limpieza del hogar que sean amigables con el medio ambiente, hasta usar fertilizantes para la tierra que no contaminen los ríos, lagos, quebradas y embalses.