La Agencia de Regulación y Control de las Telecomunicaciones (Arcotel) mediante la Resolución 2018-0995 ordenó que en máximo tres meses se retiren los inhibidores de señal celular a nivel nacional.

La resolución pide a las Superintendencias de Bancos y de Economía Popular y Solidaria, que en el ámbito de sus competencias, en el plazo indicado, procedan a la modificación de la normativa vigente para cumplir con esta medida.

Así mismo, pide a los bancos que en tres meses desinstalen dichos inhibidores de señal, cuyo propósito inicial había sido intentar disminuir actos delincuenciales que se podrían haber organizado mediante llamadas telefónicas, dentro o en las cercanías de las entidades financieras.

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Entre los argumentos para la toma de la medida está que todos los ciudadanos tienen derecho universal al acceso a la tecnología y comunicaciones.

Sobre el tema, Marco Rodríguez, asesor legal de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (Asobanca), explicó que reciben la resolución con agrado. Esto debido a que la restricción había sido tomada de manera antitécnica y no cumplía con el objetivo de bajar la acción de los sacapintas, pues son otros los métodos que utiliza la delincuencia para cometer sus ilegalidades. Adicionalmente, lo que había causado el uso de esos artefactos era dificultad de comunicaciones de las propias entidades financieras como las de comercios aledaños, lo cual era contraproducente. También comentó que el uso de celulares es controlado por parte de la seguridad de los bancos e inclusive existe una conciencia ciudadana para no utilizarlos dentro de las entidades.

Rodríguez explicó que al momento las entidades financieras esperan una resolución final de la Superintendencia de Bancos instruyendo al retiro, pero dijo que con la dispoción del Arcotel se ha empezado un proceso de análisis para el desmontaje organizado. (I)