Cinco oficiales de las Fuerzas Armadas fueron convocados a la Fiscalía General para rendir versión en torno a la instrucción fiscal que existe por el supuesto delito de tráfico de armas y municiones pertenecientes a las Fuerzas Armadas y que aparentemente tenían como destino el grupo disidente Oliver Sinisterra, liderado por Walter Arizala, alias Guacho.