La Empresa Pública del Agua (EPA) no cobra actualmente por el servicio de evitar inundaciones tras las obras construidas con ese fin que están en operaciones. Sin embargo, la entidad indica que desarrolla “un modelo de gestión el cual permitirá el cobro por el mantenimiento de los sistemas hídricos a su cargo”, en respuesta a EL UNIVERSO.

La idea es cobrar a los beneficiarios de esos proyectos por ese servicio estatal ya que, según Henry Cáceres, gerente general de la EPA, son agricultores que pueden realizar varios cultivos al año e incluso durante el invierno.

“Solo por cobro de mantenimiento de operación se pueden recaudar $ 42 millones y por autorizaciones (para uso del líquido) más o menos $ 36 millones, es decir que solo con la regularización, la concienciación de las personas, no le tiene que costar un centavo al Estado”, señala.

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Los sistemas de control de Cañar, Naranjal y Bulubulu benefician a 207.000 habitantes en las provincias del Guayas y Cañar, según la EPA. Pero se requiere de obras complementarias para aprovechar toda el agua retenida.

Por ejemplo, el sistema de control de inundaciones Cañar cuenta con un embalse de retención temporal para 13’700.000 m³ de agua.

“Para aprovechar el recurso hídrico... es necesario ejecutar los estudios complementarios para implementar el riego dentro de la zona de influencia del sistema”, reconoce la EPA.

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El embalse del sistema del Bulubulu tiene una capacidad de almacenar 12’000.000 m³ de agua cruda. Una parte sí es usada para regar zonas de los alrededores del embalse.

“Para repotenciar las zonas agrícolas... es necesario ejecutar un estudio complementario, con canales de derivación secundarios”, indica la EPA sobre esta última obra.

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Cáceres dice que prefecturas tienen la competencia de hacer obras en cuencas y microcuencas, según el Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización (Cootad). (I)