A pocos kilómetros de las montañas de Colonche, en la parte céntrica de la provincia de Santa Elena, Bartolomé Tomalá corta el monte que ha crecido alrededor de las plantas de sábila sembradas en una hectárea y media. Es una plantación que lleva cuatro años de cultivo y las pencas de la sábila (aloe vera) lucen verdes y gruesas.