En la actualidad, para quienes revisan a diario las noticias en los medios de comunicación, la palabra sicario genera una especial aberración y desprecio.

El término proviene de la palabra latina sica, tal como se denominaba a un puñal, daga o espada corta curva que, por su reducido tamaño, resultaba fácil de esconder en los pliegues de la toga o bajo la capa. Esa particularidad permitía al asesino acercarse lo suficiente a su víctima –sin ser detectado como amenaza– para apuñalarlo por sorpresa. Era especialmente utilizada para ejecutar a enemigos políticos.

Esa repetida modalidad de crimen provocó que a partir del año 81 a. C. el derecho romano reconozca la palabra sicariis para nombrar al homicida u “hombre de la daga”. La ley, promulgada en tiempos del dictador Lucio Cornelio Sila, fue conocida como Lex Cornelia de sicariis et veneficis (Ley Cornelia sobre apuñaladores y envenenadores).

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Los primeros asesinos llamados sicarios cometían sus crímenes en medio de las multitudes. Imagen: Tomada de kknews.cc.

El nombre de esa arma se formó a partir de secare (cortar). “Juan de Valera, en su obra Leyendas del Antiguo Oriente, describía el origen de la palabra: Era el arma que usaron posteriormente los tracios y otros pueblos bárbaros del Norte. Los romanos la llamaron sica, de donde proviene el nombre de sicario. Agachándose con esta arma, el que sabía manejarla asestaba a su contrario el golpe de abajo a arriba, a fin de abrirle el vientre”, menciona el sitio El Castellano, que cita dos libros de Ricardo Soca: La fascinante historia de las palabras y Nuevas fascinantes historias de las palabras.

Los sicarios eran hábiles para el sigilo y el disfraz, e incluso se maquillaban como mujeres para reducir sospechas entre la masa, comenta también el blog Gladiatrix en la arena. En ocasiones, aceptaban sobornos para no matar a sus víctimas previstas y podían tomar rehenes para solicitar el pago de un rescate o el intercambio de prisioneros.

Por internet y en privado se oferta el sicariato, penado en Ecuador desde el 2014; existía mucho antes y va en alza

La palabra fue adoptada por los denominados sicarii, un grupo radical que en el año 66 d. C. luchó contra los romanos y los palestinos que los apoyaban. El portal Muy historia indica que esos terroristas primitivos preferían atacar a sus enemigos en los días festivos de Jerusalén para perderse en la multitud.

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En la época contemporánea, el sicario opera fundamentalmente con armas de fuego, las cuales comenzaron a popularizarse en la segunda mitad del siglo XIV. (I)