La aparición de peces remo en playas ecuatorianas ha elevado las alertas de varios ciudadanos ante la supuesta habilidad para la predicción de sismos u otros fenómenos naturales.

La creencia popular japonesa atribuye a que la aparición en las costas de estos peces vaticinan catástrofes, como terremotos, tsunamis, ciclones, entre otros. Esto era así porque en la antigüedad se creía que el pez remo tenía una relación estrecha con las divinidades de los mares, por ello se lo conocía como Ryugu no tsukai o ‘mensajero del palacio del Dios del Mar’.

Sin embargo, esto no ha podido ser demostrado y un estudio del 2019 en el que se descartó la asociación entre la aparición del pez y los sismos. Solo encontraron un evento que podría haber sido plausiblemente correlacionado, de 336 avistamientos de peces y 221 terremotos.

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El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (EPN) ha señalado que es imposible la predicción de un terremoto como la fecha exacta, localización y hasta la magnitud que tendrá. En el caso de las erupciones volcánicas mencionó que los métodos de vigilancia y monitoreo permite anticipar la ocurrencia en días o semanas por el movimiento de magma hacia la superficie aunque no pueden decir la hora exacta que va a ocurrir ni el tamaño que tendrá.

Sobre los tsunamis la entidad añadió que una vez que se genera un sismo en el océano se puede pronosticar las áreas que sean afectadas así como el tiempo de arribo a determinadas costas se pueden prever tomando en cuenta factores como el epicentro y la magnitud.

“A veces es fácil anticipar si luego de un sismo en la costa se va a producir un tsunami, pues suele ocurrir que el mar se retira como si bajara rápidamente la marea, y lo hace hasta distancias superiores a las de las mareas, a tal punto que en ocasiones han quedado peces en las orillas”, se añadió.

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En un artículo de Edgar Tapia Hernández, doctor en Ingeniería Estructural, publicado en el 2013, se analizan varios métodos que se mencionan como predicción de sismos, uno de estos es el comportamiento animal. Sobre esto se señala que este comportamiento se puede explicar porque las ondas en el suelo se asemejan a las que se dan en un estanque de agua que está en reposo y se echa una piedra. “Enseguida de que ocurrió el sismo se propagan unas ondas llamadas P o Primarias que transfieren movimientos de compresión entre los estratos del suelo y que son seguidas de las ondas S o Secundarias que son más destructivas debido una movimiento ondulatorio”.

Mientras que en los sistemas de alerta sísmica como los implementados en Ciudad de México funcionan de acuerdo al epicentro del sismo lo que puede dar segundos para la evacuación de infraestructuras. Es decir, alertan una vez que se da el movimiento telúrico. (I)