La historia familiar del ‘Chapo’ Guzmán, entre lujos, escándalos y desgracias

Además de la gran fortuna y las vivencias del narcotraficante, su legado está visible en sus hijos, quienes —según expertos— no logran alcanzar el poder ni la fama de su progenitor desde su extradición en 2017 a Estados Unidos.“Los hijos del Chapo controlan un territorio pequeño, y quisieran ser los líderes del cártel, pero no son capaces”, opinó Mike Vigil, exdirector de Operaciones Internacionales de la Agencia Antinarcóticos Estadounidense (DEA), en una entrevista con AFP . Sin embargo, sus nombres suenan y alertan a las autoridades.Los hijos son diez, pero los más conocidos del Chapo son Jesús Alfredo, Iván Archivaldo, Alejandrina Giselle y César, de un mismo compromiso y conocidos como “los Chapitos”. Todos son hijos de María Alejandrina Salazar Hernández . Luego están Joaquín, Édgar, Ovidio y Griselda Guadalupe, hijos del narcotraficante con Griselda López Pérez .Iván Archivaldo, Jesús Alfredo y Ovidio Joaquín —conocido como “el Ratón”— son actualmente buscados por la ley y parte del mundo delictivo, gracias al narcotráfico. De hecho, Iván se oficializó como sucesor de su padre y es conocido como “el rey de la cocaína”; es propietario de la mayor parte de laboratorios de fentanilo en Culiacán.Iván fue detenido en 2005 tras un accidente de tráfico al salir de una fiesta en Zapopan, Jalisco. Lo condenaron a cinco años de cárcel por lavado de dinero y fue absuelto en 2008 por falta de pruebas.El Chapito es heredero de un imperio que incluye bienes inmobiliarios y hoteles, entre otros negocios. Es objetivo de las fuerzas de seguridad y contaba —parece— con enemigos fuera y dentro de su organización. Además, está en la mira del Gobierno estadounidense por introducir grandes cantidades de cocaína, heroína, metanfetaminas y marihuana a Estados Unidos a través de vehículos, camiones, embarcaciones y túneles. Buena parte de la materia prima utilizada por el cártel era importada de Asia, Colombia, Ecuador, Venezuela, Perú, Panamá, Costa Rica, Honduras y Guatemala.Este compendio de delitos no forma parte de la vida de César, quien no es parte de la industria, o Alejandrina Giselle, quien ahora trabaja vendiendo artículos característicos de su padre; ella se asume como la dueña de la marca Chapo Guzmán. Ambos prefieren mantenerse lejos de negocios ilícitos.Por su parte, Ovidio Guzmán López está en la lista de personas con las cuales no se debían realizar negocios, transacciones, envíos de dinero o identificación de sus operaciones financieras desde 2012, por la Oficina de Control de Activos estadounidense (OFAC); y su hermano Joaquín es investigado por la Fiscalía Federal en Washington, a causa de importación de drogas al país vecino y actividades de narcotráfico internacional.Y finalmente, Édgar Guzmán fue ejecutado en mayo de 2008 en Culiacán, Sinaloa. Mientras Guzmán se encontraba en un centro comercial, un grupo de pistoleros le disparó sin piedad con AK-47. Su nombre había encabezado una lista de posibles víctimas del crimen organizado.Los hijos mayores de Guzmán y herederos del cártel de Sinaloa comparten publicaciones que dejan ver todo el poder de su padre y el dinero que tienen. Por ejemplo, una de las imágenes más controversiales de los herederos del Chapo es una en el interior de un vehículo BMW con dos leones cachorro . Además, dos aeronaves, una de ellas en color rojo.Esta imagen fue publicada en Twitter por Iván Guzmán, de 33 años de edad, también hijo del Chapo. (Twitter/@_IvanGuzman_). La autenticidad de las cuentas no ha sido verificada.Coronel, la esposa actual de Guzmán, es una exreina de belleza del norteño estado de Durango. Con ella tiene dos hijas gemelas: Emaly y María Joaquina. Mientras había una ola de crímenes, la última esposa del narco decoraba sus redes sociales con varias fotos llenas de excentricidades y ostentosos detalles.En la cuenta personal de Instagram de la también llamada “Kardashian de Sinaloa” (@_emmacoronel_) se podían encontrar varias fotografías de viajes, joyas, bebidas, autos de lujo e incluso autorretratos. Sin embargo, hoy hay pocas publicaciones.En la actualidad, ella podría pasar varios años en prisión tras declararse, ante un juez federal de Washington, culpable de narcotráfico y de ayudar a su marido a escapar de prisión.“Todos estos inconvenientes (problemas legales) derivados a lujos y gastos, demuestran, según los expertos, que aunque heredan el legado del narcotraficante no son capaces de hacer crecer el negocio, lo que podría significar el fin del linaje de Guzmán“. “Los hijos del Chapo empezaron cuando su papá estaba encargado del cártel (de Sinaloa), pero ellos nunca han ensuciado sus manos, solo se han dedicado a gastar la fortuna de su padre”, aseguró Vigil, según recoge un artículo de El Universal .

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