La tintura sin amoníaco se presenta como una opción de coloración menos agresiva. Esto le puede servir a aquelas personas alérgicas, con pieles sensibles e, incluso, embarazadas. ¿En qué se diferencia el tinte con y sin amoníaco?

El amoníaco es una sustancia química que se produce de forma natural en el cuerpo humano, en el suelo, el agua y el aire. Su carácter alcalino hace que tenga un efecto disolvente, por eso está presente en productos de uso diario.

En los tintes para el cabello, el amoníaco cumple la función de abrir la cutícula para que el color penetre más y, por ende, dure más.

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La tintura sin amoníaco se recomienda particularmente para las personas con alergias, con alguna irritación en la piel y para mujeres embarazadas, ya que es mucho menos agresiva. Lo que varía es la durabilidad, ya que no penetra en la cutícula de la misma forma que la tintura con amoníaco. Además, la cantidad de colores y tonalidades es inferior.

El estilista Diego Perla indica que es recomendable las tinturas sin amoníaco para embarazadas y para las personas que quieran cambiar un tono de color de pelo sin la necesidad de aclarar tanto. La duración óptima de una tintura sin amoníaco es de un mes. (I)