Evitar el consumo de alcohol es un gran reto que tenemos por delante como sociedad, pues desde siempre ha formado parte de nuestra cultura. Las bebidas alcohólicas están en celebraciones, espacios de ocio, encuentros con familiares y amigos.

Sin embargo, el alcohol está relacionado con más de 200 enfermedades y trastornos.

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Consumo de alcohol y su relación con el cáncer

El consumo de alcohol produce cáncer, de acuerdo a Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, el 12 % de todos los cánceres tienen una relación directa con la ingesta de alcohol, en especial de boca, esófago, garganta (faringe y laringe), hígado, intestino grueso (colon y recto) y mama.

Si al consumo habitual de bebidas alcohólicas le añadimos el de tabaco, se multiplica el riesgo de padecer algunos de estos cánceres entre 10 y 100 veces respecto a las personas que nunca han fumado ni bebido.

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Cuanto mayor sea el consumo, mayor será el riesgo. Por tanto, la cantidad apropiada de alcohol para la prevención del cáncer es cero alcohol.

Y debe tenerse en cuenta que todos los tipos de bebidas alcohólicas hacen aumentar el riesgo de padecer cáncer.

Cómo prevenir el cáncer

La evidencia científica indica que se puede reducir el riesgo de padecer cáncer mediante comportamientos alimentarios y de actividad saludables.

Al hacerse las pruebas de detección con regularidad se puede detectar de manera temprana el cáncer de mama, de cuello uterino y colorrectal (colon), cuando el tratamiento suele ser más eficaz.

Además, CDC detalla que se deben tomar decisiones saludables como mantener un peso saludable, evitar el tabaquismo, limitar la cantidad de alcohol que consume y proteger su piel del sol. (I)