El derecho corporativo ofrece mecanismos e instrumentos como son los contratos, que son acuerdos por el que las partes se comprometen a respetar y cumplir una serie de condiciones. Sin embargo, en la vida cotidiana se llevan a cabo un sinfín de contratos, y en algunas ocasiones sin siquiera estar conscientes de esto. Muchos “acuerdos” a los que dos partes llegan son contratos que surten efectos legales, pero no constan por escrito.