Por Carlos F. León para El Universo

Dicen que ningún mar en calma hizo a un marinero experto; por ello, la cantante ecuatoriana se prepara para el sinfín de retos que le trae este nuevo año. Una nueva vida en un nuevo país, y un nuevo contrato con Sony Music buscan catapultar a nuestra artista hacia el firmamento de talentos mundiales.

¿A quién debo entrevistar, a María del Mar o a Mar?

Publicidad

A las dos

Mar, ¿qué se siente estar en todos lados en este momento?

Siento que tengo bastante responsabilidad, que tengo que estar consciente de que mucha gente está observando todo lo que estoy haciendo, que es una época de mi vida bastante vulnerable.

Publicidad

¿Por qué?

Porque a los 20 años normalmente es la etapa donde la universidad, es la etapa donde cometes errores y pues ya hemos visto cómo esto ha pasado con otras figuras públicas, obviamente mucho más famosas que yo, pero aún así siento que tengo esa responsabilidad de siempre estar consciente de que hay mucha gente que está observando y que tal vez de alguna forma me admira. Siempre buscar no quedar mal con ellos.

Publicidad

Una carrera de realities

Aunque afirma que ya era conocida a nivel local por la Sin control, la banda que conformaba con sus amigos Alfredo y Bernardo, su fama nacional llegó con Ecuador tiene talento, en 2014, llegando a su cumbre mediática con La academia, el reality mexicano donde obtuvo el tercer lugar, el año pasado.

De ETT a La academia pasan ocho años, ¿cómo la luchaste?

Estuve sacando mi propia música, pero mis papás querían que termine el colegio. No me fue muy bien al principio porque las radios acá estaban más enfocadas en el pop urbano y en el reguetón, entonces me costaba muchísimo entrar.

¿Nunca pensaste en rendirte y sacar algo urbano?

Publicidad

Antes de irme a México saqué algo pop urbano, porque sabía que tenía que irme por algo mainstream si quería empezar a sonar, entrar a radios. Pero yo sabía que en el pop urbano no estaba mi esencia y no quería perder quién era. Pero siempre hay gente que quiere escuchar algo diferente.

¿Te tocó hacer payola?

No, nunca. Me arriesgo y digo “el que quiere escuchar esa canción la va a escuchar y tal vez ahorita no tendrá la difusión grande, pero prefiere que sea apoyo honesto, porque te sirve a la larga. Y a principios de este año vi el gran cambio.

¿Cómo ingresas a La academia?

Dije ‘es momento de enfrentar esto, porque si quiero crecer como artista, tengo que aprender a lidiar con todo esto’. Mis dos mayores planes (en el reality), más que ganar eran darme a conocer.

¿Pensaste alguna vez que con este reality tenías que dejarlo todo?

Es que mi plan nunca fue dejarlo todo. Mi plan era ir en vacaciones de la U y regresar. Pensé que iba a estar unos capítulos y regresar cuando empiece el nuevo semestre, y seguir estudiando. Pero todo cambió, ya llegué a la final y cuando llegué acá todo era diferente.

¿Fuiste sin fe en ti?

No. Mi plan era darme a conocer y dar a conocer que en Ecuador había talento. Siempre he dicho que mientras más nos apoyemos los artistas de acá, más vamos a crecer. Siempre he tenido esa creencia de que por qué todos los artistas colombianos han salido adelante y es porque todos se conocen entre todos, y eso espero que se de acá en Ecuador, que nos sigamos apoyando, porque esa es la clave, que podamos compartir público.

¿Por qué crees que quedaste en tercer lugar y no primero?

No lo voy a decir (ríe). Porque la gente votó más, fui muy suertuda porque era la primera vez que se transmitía en Ecuador, pero llegar al tercer lugar con los votos de la gente a mí me parece increíble.

En la votación de los jueces todos esperábamos que el premio te lo dieran, pero se lo otorgaron a Nelson, ¿qué faltó para superarlo?

Eh… (Silencio) La verdad no sé, siento que lo di todo y con eso me siento muy tranquila.

Una nueva vida

Su tercer lugar en el concurso mexicano le otorgó la oportunidad de grabar dos sencillos con la disquera internacional Sony Music México. A diferencia de sus dos compañeros finalistas decidió grabar dos covers y no un tema inédito, pero su talento le abrió las puertas a algo que siempre soñó.

Luego del reality llega la propuesta de Sony, cuéntanos sobre ella.

Llega después de una cena del lanzamiento de Déjame ir, pero lo mantuvimos en secreto por discreción. Vamos a firmar con ellos por unos años más y empezar a hacer temas inéditos. Me están dejando también componer y eso me hace feliz porque siempre he sido cantautora y nos estamos preparando para tener nuevos lanzamientos.

Tu casa tiene un toque mexicano, como si lo hubieras decretado.

A mi mamá siempre le ha gustado México, la cultura mexicana, quizás todo estaba destinado a ser.

¿Ya tienes establecido dónde vas a vivir en México?

Me voy a vivir con Rubí (participante de La academia), pero creo que vamos a vivir en un departamento (en Ciudad de México).

¿Qué te llevas de Ecuador a México?

Alguna vela. Ese truco se lo vi a Harry Styles, cuando pasaba mucho tiempo fuera de casa se llevaba un olor que le recuerde a su casa en Inglaterra para no volverse loco.

¿Te llevarías a alguien?

A nadie, pienso que es un nuevo momento para mí y que debo afrontarlo sola.

¿Qué esperas tú de este contrato?

Que me ayude a entrar a series.

¿Sueñas con estar en televisión?

No, poner la música en series. Por ejemplo, que Netflix ponga una canción mía en un soundtrack de una película o novela.

¿Y si te proponen entrar a la TV?

Como actriz soy malísima. Teatro sí me gusta, estuve en Blancanieves, en 2021. Me encantó porque a mí siempre me ha gustado el baile y el canto y fue la primera vez que pude hacer las dos profesionalmente.

¿Sony te ha pedido que cambies algo de ti?

Nada, me han guiado un poco más en el sonido que queremos, pero que yo también quería; antes era un poco plana y ahora puedo sacar toda mi voz en los coros, y siento que esto le está dando un toque muy moderno y es un cambio positivo.

¿Ahora vas a un mercado más grande, te has preparado para este nuevo reto?

Hay que estar preparado para lo que se venga: puede ser más grande como puede ser que baje todo. Es suerte, pero también depende de que el artista no se rinda.

¿Y cómo harás para no rendirte?

Seguir escribiendo canciones, seguir haciendo lo que me apasiona, porque sé que siempre habrá un público que me quiera escuchar. (E)