Tomó la decisión de ‘ir a probar suerte’ a Colombia hace siete años, cuando tenía 23 años de edad y ya había cosechado importantes éxitos sobre todo en la escena teatral guayaquileña. Pero lo que comenzó como una aventura entonces aún incierta se tradujo para la actriz Shany Nadan, hoy de 30 años, en la puerta de entrada a importantes cadenas internacionales como Telemundo, Netflix, Fox Telecolombia, Caracol Televisión y otras que ya tiene en mira. “Por supuesto, la gente se entera del personaje en que quedas, pero no se enteran de todos los otros castings que has hecho y que quizás te han dicho ‘lo siento, muchas gracias, pero no’. Esto es una carrera de mucha paciencia y determinación”, confesó en una reciente conversación vía Zoom con La Revista.

Esta semana, Shany podrá sentarse a disfrutar de un merecido momento de celebración con el estreno de Las Villamizar en la señal de Caracol Televisión (Colombia), la nueva serie de época y de acción en la que comparte protagonismo con las actrices María José Vargas y Estefanía Piñeres. Las tres son las hermanas Villamizar, tres mujeres que luchan por la libertad de las fuerzas españolas y también por hacer justicia tras la muerte de su madre. “Lo que me encanta es que la serie está contada desde el punto de vista femenino al 100 %, desde la perspectiva honesta, real, completa y compleja de lo que significa ser mujer y no desde un estereotipo”, resalta.

¿Qué puede adelantar sobre la serie y su personaje?

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La serie ocurre en el contexto histórico y social de 1800, cuando los criollos estaban buscando la liberación del yugo español, pero con énfasis en el rol femenino y en el papel que tuvo la mujer en esa época, sobre todo en el espionaje, a través de infiltrarse y compartir información estratégica al ejército libertador para lograr la tan anhelada independencia.

Mi personaje, Carolina, es la mayor de las tres hermanas Villamizar y es su protectora, la valiente, la racional, la estratega, la que mentaliza el siguiente paso. Una mujer que controla bien sus emociones y que antepone el bien común frente a sus necesidades personales porque está al servicio de algo más grande, la libertad.

¿Cómo fue su preparación para este rol?

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Fue bastante peculiar porque fue durante el primer año de pandemia y gran parte de los ensayos fueron virtuales (...). Y cuando ya pudimos vernos, hicimos también ensayos con Golpe de Gracia, que es la empresa encargada de los stunts y de las escenas de acción, para el manejo de armas de época (espadas y pistolas). Tuvimos que aprender mucho de combate escénico también porque hay escenas de peleas y por varias semanas preparamos movimientos genéricos, por así decirlo, movimientos aislados para luego componer coreografías en el set, según las necesidades de la escena y según la locación en la que estamos grabando.

¿Cómo fue su relación con María José y Estefanía?

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Las considero mis hermanas no solamente en la serie, sino también fuera de la ficción. Tenemos una sororidad increíble y una buena química, nos hablamos hasta el día de hoy porque no somos solo buenas colegas, sino también buenas amigas. Fue muy fácil trabajar con ellas, todo se sintió muy orgánico y natural y ya parecíamos hermanas antes incluso de empezar a grabar.

Las Villamizar: Estefanía Piñeres (i) es Leonor; María José Vargas (c) interpreta a Isabela y Shany Nadan (d) es Carolina. Foto: Cortesía

¿Cómo se siente trabajando para estas grandes cadenas?

Muy honrada y agradecida porque he tenido la oportunidad de perfeccionar y aumentar mi calidad profesional. Trabajar con actores de tan alto nivel para mí ha sido gratificante, pero sobre todo ha sido un desafío porque me ha tocado elevar mi vara laboral, esforzarme el doble para llegar a lo que el director quiere ver, cada proyecto me ha retado más. Y, como ecuatoriana, trabajar con estas cadenas internacionales ha sido no solamente un honor, sino también poder llevar un pedazo de mi tierra conmigo, un pedazo para demostrar lo que hay acá en Ecuador, todo el talento.

¿Cree que su formación teatral la ayudó a estar a la altura de la competencia internacional?

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Es la formación más completa que hay, sin duda. Te da una gran capacidad de improvisación y te vuelve más recursivo. Si algo le agradezco el teatro es que me permitió explorar todo mi aparato laboral, la voz, el cuerpo, la interpretación y memorizar textos que son muy largos y difíciles de aprender. Te da mucha rapidez y agilidad mental y física y todo eso lo puedes trasladar a la televisión y te vuelves un actor más flexible. Sin el teatro yo no hubiese podido ser la actriz que hoy soy.

La actriz tiene ofertas para regresar al teatro cuando los aforos se regularicen debido a la pandemia de COVID-19. Foto: Cortesía

¿Cómo divide su tiempo entre Ecuador y Colombia?

Yo trabajo en Colombia y vivo en Ecuador (risas), ¡es lo que siempre digo! Es decir, trabajo siete u ocho meses en Colombia y el resto del tiempo lo aprovecho para ir a Ecuador y estar con mi familia, porque realmente cuando estoy trabajando no tengo vida. La pandemia ha facilitado que los castings sean ahora en su mayoría virtuales, entonces puedo trabajar desde Guayaquil, enviarlos y una vez que me toque hacer un callback o me toque ir presencial, viajo, lo hago y me regreso.

¿Qué extraña de su país cuando está trabajando en Colombia?

Mi familia es lo primero, mis amigas, que son mi círculo desde el colegio y que me conocen muy bien, más allá de Shany, la actriz. También el clima, sin duda, tener acceso a la playa y la comida, extraño mis mariscos, mi cebiche, mi cazuela.

Su carrera se caracteriza también por haberse mantenido lejos de polémicas o chismes, ¿cómo lo ha conseguido?

Por naturaleza, soy una persona sumamente íntima. Soy de contar muy pocas cosas en mi vida personal, soy muy reservada y lo he sido siempre. Entonces no es que apliqué una estrategia per se, sino que seguí siendo yo misma. Y me beneficia en mi trabajo en el sentido de que yo quiero que la gente me conozca por mi trabajo y no por mi vida personal. Lo negativo es que de pronto el público no conoce tanto de mí además de lo laboral. Sí trato de compartirlo en redes sociales, pero tampoco abro completamente las puertas de mi intimidad porque siento que una vez que las abres será muy difícil cerrarlas.

En los próximos meses Las Villamizar también estará disponible para todo el mundo en Netflix.