De las narradoras ecuatorianas que destacan en la actualidad quiero resaltar hoy el nombre de Sabrina Duque, periodista guayaquileña que reside en Nicaragua, de quien acabo de leer el libro de perfiles Necesito saber hoy de tu vida, publicado recientemente en Ecuador con el sello de Siamesa Editora. Es una obra de 184 páginas, en la que la autora realiza documentados retratos de personajes de Brasil y de Portugal, países en los que ha vivido.

También traductora (ha traducido al español El alienista, esa alucinante novela breve del escritor brasileño del siglo XIX Joaquim Machado de Assis), Sabrina no narra ficciones en las obras de su autoría. En sus libros (Lama, 2017; VolcáNica, 2019) escribe narrativa de no ficción. Cuenta la realidad con herramientas literarias, pero con estricta rigurosidad periodística: el dato confirmado y reconfirmado, la fuente autorizada, las voces necesarias para que cada historia quede redonda, como solemos decir en el mundo periodístico. El suyo es un periodismo literario.

En su galardonado libro de crónicas VolcáNica (con este proyecto ganó la Beca de Crónica Viajera Michael Jacobs 2018), la narradora habla de Nicaragua, su país actual de residencia, de la vocación de los nicaragüenses de vivir entre volcanes y de la lucha de los jóvenes para combatir la tiranía de un hombre que alguna vez también combatió al tirano.

Necesito saber hoy de tu vida es, en cambio, una obra en la que expone nueve hermosas y minuciosas historias de igual número de personajes: unos desconocidos, casi anónimos, y otros mundialmente famosos, como Cristiano Ronaldo, uno de los reyes indiscutidos del fútbol; Fernando Pessoa, el gran poeta de Portugal; o Roberto Carlos, el ídolo de la canción romántica brasileña. Justamente un verso de una de las más famosas canciones interpretadas por este artista sirve de título al libro de Sabrina (¿recuerdan Qué será de ti? “Necesito saber hoy de tu vida/ alguien que me cuente sobre tus días…”. Son perfiles interesantísimos con los que la autora ecuatoriana nos muestra y demuestra que la literatura no solo es la ficción. Busquen el libro.