El matrimonio le da a la pareja la oportunidad de compartir la vida y juntos enfrentar los temores, los desafíos y los misterios que encontrarán en el camino. También les hará reconocer y aceptar sus debilidades, que con el paso del tiempo aprenderán a superar o a adaptarse. En el mejor de los casos, desarrollarán mutua confianza y dependerán el uno del otro.