El hombre piensa que solo cuando se cree profundamente en ello, se puede combatir el coronavirus con rezos, y que la pandemia es una prueba y la voluntad de Dios. Y si él muriera de todas formas, esto sería por un deseo divino, relata el integrante de un movimiento religioso libre a la consultora Sandra Pohl. "Él pensaba que si se creía lo suficiente en Dios no hacía falta respetar las medidas de restricción por la pandemia", agrega la directora del centro de asesoramiento Zebra de la ciudad alemana de Friburgo.