Durante las últimas semanas mi hijo ha asistido a varios comités directivos, reuniones de planificación, diseño de proyectos, seminarios web y cursos de formación, lo cual ha significado una experiencia importante para él, tomando en consideración que solo tiene unos meses de nacido. Mi esposa y yo asumimos por completo su cuidado mientras trabajábamos desde casa, por eso, en ocasiones, fue inevitable aparecer en cámara con él.
Debo confesar que al principio me preocupaba la incomodidad que esto podía representar para los demás participantes de las reuniones, pero me encontré que muchos se hallaban en una situación similar y más bien se convirtió en un tema muy común el expresar cómo cada familia estaba asumiendo la responsabilidad de cuidar y educar a sus hijos.
Estos diálogos aportaron frescura, compartiendo muchas anécdotas alrededor de las expresiones de inocencia de los niños en las reuniones de trabajo. Esta mezcla de trabajo y paternidad fue una vivencia interesante, pues más allá de la disciplina que tuvimos que adquirir para abarcar todas las responsabilidades adquiridas, el trabajo también tuvo un baño de la alegría natural de los niños.