El retorno a las clases presenciales para los más de 60.000 estudiantes de la Universidad de Guayaquil, previsto para este mes de enero, quedó postergado. Y mientras el rector, Francisco Morán Peña, asegura que se suspendió debido al actual pico de la pandemia de COVID-19, los estudiantes creen que en realidad la institución no ha puesto en marcha un plan para el regreso progresivo.