En el suroeste de Guayaquil, el primer día del feriado de carnaval arrancó con vecinos cargando cartones y tubos para armar piscinas y colocarlas sobre la vía. Una familia de las calles Eugenio Garzón y Sucre, en esta zona de la urbe, colocó la estructura rectangular de unos dos metros frente a su vivienda la noche del viernes.

Con mangueras conectadas a dos llaves de la casa llenaron hasta la mitad la lona, que está amarrada a cuatro tubos blancos con pedestal y de poco menos de un metro de alto.

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¿Las piscinas en las aceras estarán permitidas en este carnaval en Guayaquil?

Este artículo de color celeste lo adquirieron en 2023, en la Bahía; en ese año lo usaron para el feriado de la Batalla del Pichincha —en mayo— y luego para carnaval de 2024. Sin embargo, en este último asueto, la piscina armada duró solo un día, ya que en un operativo ejecutado por el Municipio y la Policía se solicitó el retiro.

“Ya después del carnaval (de 2024) no quisimos arriesgarnos a que se nos lleven nuestra piscina, como les pasó a unos vecinos, así que estábamos por venderla en este año; pero un familiar nos dijo que intentemos ponerla este año porque el alcalde algo así había dicho de que se iba a poder”, dijo José León, un padre de familia.

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Así como José, otros vecinos de las calles Sucre, Carchi y Tulcán también apostaron por desempolvar piscinas y colocarlas frente a los portales.

Delia Quintero, quien vive en la zona desde hace más de 20 años, contó que niños y jóvenes empezaron a lavar la lona de las piscinas y a inflar otras pequeñas para usarlas durante el feriado de carnaval, que se extiende hasta el próximo 4 de marzo.

Varias piscinas se observan en las calles 10 de Agosto y la Décima. Foto: José Beltrán

“Aquí la gente se queda en casa, siempre comparten entre los del barrio, y esas piscinas toda la vida han sido motivo de reunión de la gente que vive por aquí. Ojalá que no nos quiten eso”, manifestó Quintero.

En las diferentes calles que colindan con la 10 de Agosto, desde la mañana del sábado, se observó a personas sacar pedazos de plástico negro para colocarlos en la vía y sobre eso instalar las piscinas y evitar que estas se maltraten.

Esto lo hicieron, indicaron vecinos de esa zona, luego de que el alcalde “diera a entender” que se podrían colocar las inflables o armables sin afectar la movilidad en la ciudad.

El alcalde Aquiles Alvarez, durante su último enlace radial, al ser consultado sobre este tema comentó lo siguiente: “La verdad, a veces, es mejor hacerse el loco. La gente también tiene que disfrutar, sin dejar que se convierta en anarquía. Pero con tanto problema que hay y sin plata...”.

“Entendimos que podíamos poner, siempre y cuando no bloqueemos nada o se arme relajo”, indicó una vecina del Guasmo, sur de la ciudad.

Otros ciudadanos que viven en esa zona dijeron que esperarán hasta la tarde del domingo o lunes para colocar las piscinas. “Vamos a ver si es que hacen los operativos y las quitan; si vemos que no hay eso, entonces vamos a llenarlas de agua”, dijo un vecino.

Municipio retiró 18 piscinas en cinco sectores de Guayaquil en febrero 2024

Colocar piscinas inflables o armables en los domicilios para el feriado de carnaval es una práctica común que se observa año a año en diferentes sectores de Guayaquil. Los grupos familiares, sobre todo los que no salen de la ciudad, se inclinan por esta alternativa.

Esto se realiza a pesar de que en la ciudad rige la Ordenanza de Uso del Espacio y Vía Pública, que detalla que es obligación de las personas “no obstruir la vía pública”, por lo que en los últimos años se han ejecutado operativos para retirar estas estructuras durante feriados.

En 2024, varias personas fueron sancionadas en la ciudad por la colocación de piscinas en la vía. La multa fue un salario básico ($ 460).

Las sanciones se aplicaron a ciudadanos residentes de Colinas de la Alborada, Sauces 4 y La Pradera, en el norte.

Los agentes retiraron al menos 18 piscinas en ese año que ocupaban la vía pública e impedían la libre movilidad. Las acciones de control fueron lideradas por la Dirección de Justicia y Vigilancia en 2024.

“Esperamos que el alcalde nos permita tener nuestro sano esparcimiento con las piscinas; pero si es de quitarlas, pues, tocará obedecer”, indicó otro morador del suroeste. (I)