Con el objetivo de evitar accidentes al manipular pirotecnia, el Municipio de Guayaquil impulsa la campaña “La pirotecnia no es súper”.

Esta iniciativa busca frenar los casos de quemaduras, amputaciones y secuelas permanentes que derivan del uso de estos artículos durante los festejos de Fin de Año.

Los ruidos intensos y repentinos pueden afectar a niños con discapacidad, generar estrés en perros y gatos y perturbar la fauna silvestre cercana. Los explosivos también contribuyen a la contaminación ambiental, liberando sustancias químicas que afectan la calidad del aire y los ecosistemas urbanos y naturales.

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En ese sentido, el cabildo busca promover un cambio cultural: que la diversión y la tradición no se traduzcan en lesiones ni sufrimiento para los más vulnerables. Esto debido a que año a año se reportan incidentes con niños que pierden extremidades o sufren quemaduras.

Esta iniciativa complementa la campaña impulsada por el Cuerpo de Bomberos de Guayaquil desde mediados de diciembre.

“No apagues las fiestas” es una acción comunicacional que busca generar conciencia sobre los peligros de la pirotecnia y fomentar entornos festivos seguros.

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En 2023, los bomberos brindaron atención prehospitalaria a tres personas heridas por la manipulación de estos artefactos, una de ellas perdió la vida. En 2024 se registraron dos incendios y seis personas con lesiones por uso de pirotecnia, dos de ellas eran niños.

Los datos, indicó la institución, evidencian la necesidad de intensificar acciones de concienciación y control.

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Entre las recomendaciones está evitar el uso de pirotecnia para las celebraciones de Fin de Año, así como para la quema de monigotes. Asimismo, se recomienda que no se recojan artefactos pirotécnicos que no detonaron y que no se extraiga ni se manipule el contenido de estos artículos. (I)