Mantener en descenso los casos de COVID-19 es el reto que busca Guayaquil con una modificación de las normativas de prevención de contagios en la ciudad antes de la finalización el estado de excepción a nivel nacional para el próximo domingo 13 de septiembre.

Este martes, la alcaldesa Cynthia Viteri explicó que la culminación del estado de excepción no significa que todo volverá a la normalidad en la ciudad, pues el COE cantonal tiene toda la competencia para mantener las restricciones y regulaciones de actividades en la urbe.

Viteri detalló que ya no se aplicará el toque de queda, por ejemplo, pero que regulaciones de circulación por placa se mantendrán por la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM). Otras de las regulaciones son la operación del transporte en todas sus modalidades, el uso del espacio público, el funcionamiento de los bares y otros locales que generen aglomeración de personas, la visita a las playas, el aforo en los negocios y más actividades que han estado restringidas se seguirán reforzando independientemente de la ausencia del estado de excepción.

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La alcaldesa indicó además que Guayaquil mantendrá la atención médica en los barrios, pues se han podido controlar contagios comunitarios con la detección inmediata de infectados para así darles atención médica, tratamiento y ayuda a él y su familia, para que pasen la cuarentena con responsabilidad.

Detalló que se ha atendido a 800 000 pacientes, la tasa ha seguido bajando, estábamos en 13 cada 10 000 y ahora vamos 11,4. Ahora estamos mucho menos que esa cifra porque se han reportado menos casos, explicó.

“Yo hasta diciembre mantendré el semáforo amarillo, no importa si ya no existen semáforos en Ecuador. No importa qué medidas se tomen en el resto del país, Guayaquil seguirá con restricciones de acuerdo con las mediciones semanales que expertos realizan sobre los contagios”, explicó.

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El infectólogo Washington Alemán, director de la Mesa Técnica de Guayaquil, reiteró que así como se reabren espacios con su respectivo control, la ciudadanía debe aumentar el cuidado personal con el correcto uso de mascarilla, lavado bien de manos y el distanciamiento de dos metros.

En eso coincidió el epidemiólogo Jhonny Real, quien explicó que cada ciudad tiene su escenario y que las personas no deben confundir el fin de un estado de excepción con libertad para hacer una vida como antes ya que no es así, la pandemia sigue en curso.

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Añadió que los ciudadanos deben acostumbrarse a estas nuevas medidas como nuevas formas de vivir de aquí en adelante. “Por ejemplo, el ir a los estadios, salir de feriados a balnearios o lugares de recreación, ferias o espacios muy colapsados, deben cambiarse estas modalidades”, explicó.

Agregó que el Gobierno apela a la campaña Yo me cuido, pero deberá reforzar el mensaje para que se sigan aplicando las medidas de bioseguridad en la ciudadanía. “Hay lecciones de vida como la limpieza personal, limpieza de espacios que nos ha dejado la pandemia. Tener como prioridad la prevención no solo del COVID-19, de cualquier infección que puede ocasionar daño mayor que el virus actual”, explicó. (I)